Modelos sepultadas por escombros en la Gran Vía
Todo formó parte de una iniciativa creativa para protestar contra las grandes multinacionales de ropa
El martes por la mañana pasó algo bastante extraño en la Gran Vía de Madrid, justo debajo de los estudios de la Cadena SER, en la zona en la que están todas las grandes tiendas de ropa. Varias chicas estaban tumbadas en el suelo cubiertas por escombros y solo se veía salir una mano con un bolso muy mono o unas piernas con unos zapatos de tacón. Entonces pasó lo que suele pasar en Madrid: nadie se paró a ver qué ocurría o si estaban bien las chicas. Simplemente, quien se paró fue para sacar fotos.
¿Qué era todo aquello? Pues una obra de Yolanda Dominguez, una artista de 35 años -profesora de creatividad del EFTI-, experta en hacer virales para llamar la atención de los medios de comunicación sobre asuntos sociales y de género. En este caso, es evidente que esas chicas sepultadas son una referencia a las más de mil víctimas de la fábrica de ropa de Bangladesh; una forma de criticar que, en Occidente, nos da igual de donde haya salido nuestra ropa con tal de que sea barata.
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Evidentemente la obra la ha visto en directo muy poca gente, los que pasaron por allí, pero el vídeo está ya en YouTube. Lo ha subido hoy, por lo que es muy pronto para saber cuánta gente lo va a ver, pero normalmente las cosas que realiza esta artista acaban siendo bastante virales. Otros virales que ha lanzado:
- Colocar a dos actrices a pelearse en la cola del primer día de rebajas de El Corte Inglés a ver si los medios picaban y hablaban de la "rivalidad femenina".
- Poner a una chica vestida de marca en la calle de compras más cara de Madrid con un cartel en el que ponía "Pido para un Chanel".
- Crear una web falsa de una mujer de 65 años que aparentaba 25 para dar consejos de belleza .
- Poner a actrices en lugares públicos a imitar las poses ridículas que tienen las modelos en las revistas de moda.
Es muy curioso ver cómo los artistas están aprendiendo a usar este tipo de técnicas para llamar la atención de la gente. Se supone que son ellos los que deben saber cómo hacerlo porque es lo han conseguido toda la vida, captar la atención, pero aún hay muy pocos que consigan que sus vídeos tengan millones de reproducciones en YouTube o salir en los medios de comunicación con muy poco dinero.
