Martín Abrisketa: “La fantasía y confundir la guerra con un juego los salvó del odio”
Martín Abrisketa cuenta la Guerra Civil desde la mirada de un niño, de su padre y sus tíos que tenían apenas diez años cuando estalló


Madrid
La guerra Civil sigue siendo uno de los temas de interés más atractivos para contar. Esta tarde hablamos de un libro 'La lengua de los Secretos', que ha escrito Martín Abrisketa. Es la historia contada a través de la mirada y de los ojos de un niño, la historia de su padre Martintxo, y sus hermanos, que un día se ven en medio de una guerra civil. Un relato donde hay de todo: historia, melancolía, la fantasía de un niño, el humor... Pero sobre todo es un libro escrito con el corazón.
La historia arranca en 1937, cuando Martintxo (10 años) y sus tres hermanos, Paulina, Matilde y Lucas, tuvieron que abandonar su Arrigorriaga natal, cerca de Bilbao. Su periplo los llevó primero a Santander, y de allí a un pueblecito al este de Francia, Tenay. Tras separarse de sus padres, debe ponerse al frente de sus tres hermanos y huir de la devastación como «niños de la guerra».
"Os aseguro que mi tía es una crack", introduce Martín Brisketa a su tía, Matilde que es una de las protagonista del libro, "es un niña muy dulce". "He crecido escuchando esta historia y sabía que era mágica", narra Martín. Cuenta una historia de guerra vista por un niño, como si fuera un juego. Martín habla de que a su padre le salvó la inocencia, "la fantasía y confundir la guerra con un juego los salvó del odio". Dice que su padre "al ser niño pensaba que era invencible".
Hablar sobre este libro es hablar sobre memoria histórica porque como dice Martín "todo el mundo tenemos una historia como la de 'La lengua de los secretos'".




