Una gestión de complicada defensa

Madrid

El mes de noviembre terminó con un buen resultado desde el punto de vista de la creación de empleo y hay que felicitarse por ello y felicitar al Gobierno. Pero Mariano Rajoy va a tener muy difícil defender su gestión en el único debate que ha aceptado, el cara a cara con el candidato socialista, Pedro Sánchez, el próximo 14 de diciembre. Difícil porque aunque es cierto que la situación del empleo está mejor que hace dos años, también lo es que en todo su mandato no se ha creado ni un solo empleo más que los que había cuando llegó a la Moncloa. Hay incluso unas 20.000 personas menos trabajando que en 2011. ¿Cómo es posible, se preguntan muchos ciudadanos, si al mismo tiempo se anuncia que la legislatura acabará con 360.000 parados menos? Pues las dos cosas, menos gente trabajando y menos parados, son posibles. Los 360.000 parados no han salido de las estadísticas porque tengan un nuevo empleo sino porque han emigrado y, sobre todo, porque han pasado a ser jubilados. Por eso no hay más gente trabajando que en 2011.

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Tampoco le va a resultar fácil a Rajoy defender su mandato frente a los pensionistas, su habitual caladero de votos, por más que apele continuamente a ellos. Aunque es cierto que no ha congelado las pensiones, también lo es que está echando mano de una manera impresionante del Fondo de Reserva creado por el antiguo Pacto de Toledo y alimentado en las épocas de bonanza. Sólo desde el verano a este mes de diciembre, Rajoy ha sacado de la caja 14.200 millones de euros, lo que viene a ser, en las antiguas pesetas que manejaron esos jubilados, unos 2,3 billones. Billones con “b”. Una cifra enorme.