Cuidado, mucho cuidado, con los anuncios de Trump

Vamos a aparcar por un día Cataluña, la corrupción y la Justicia, los grandes temas del momento. Una justicia, por cierto, tan cruel que ayer hizo desplazarse a Iñaki Urdangarin desde su casa de Ginebra a un juzgado a tiro de piedra. ¡Qué castigo tan inhumano!

Así que retomemos el anuncio de Donald Trump de aumentar el presupuesto de Defensa de Estados Unidos en 51.000 millones de euros, hasta llegar a la broma de casi 600 mil millones. Solo el aumento de este año, esos 51.000 millones, es cuatro veces el presupuesto español de Defensa -¡pobre Cospedal!- y supera todo el gasto militar de Francia o Reino Unido. ¿Verdad que lo primero que se nos ocurre es que estamos ante un desvarío más de este botarate que nos ha caído en suertes?

Pues fíjense que no debe ser tal, porque en Wall Street, incluso en el Ibex, que son todos listísimos y saben interpretar los vientos como nadie, están que saltan de gozo y aquello es una verbena, que no paran de subir y subir.

Así que váyanse poniendo el casco y preparando las máscaras antigases, porque cuando el grajo vuela bajo significa que ya se inventarán los dueños del mundo alguna guerra -¿recuerdan Irak?- para que esas inversiones gigantescas tengan salida y necesiten la urgente fabricación de más y más artilugios de destrucción.

Un anuncio horrible.