Por unas televisiones públicas para todos

Damos por supuesto, dado el bombardeo mediático sobre el asunto, que ustedes ya han visto el vídeo que circula por ahí de un programa de la televisión autonómica vasca, ETB, que se llama ‘Euskalduna naiz, eta zu?’, en castellano “Soy vasco, ¿y tú?” en el que todos los que por allí aparecen se despachan a gusto contra cualquier cosa que suene a español.

Se trata de un programa de humor y sus responsables se han defendido con el conocido argumento de la descontextualización. Da igual porque el artefacto –apenas 27.000 espectadores- es bastante ridículo. Pero sirve para generar dos debates interesantes.

Uno, en cuanto a los límites del humor, últimamente dislocados con ejemplos como Le Canard Enchainné y El Jueves, o determinados tuits de jóvenes graciosísimos con bromas de un gusto digamos discutible.

Pero un segundo debate debería centrarse en los contenidos de las televisiones públicas, esas que pagamos con el dinero de ustedes e incluso de este anciano Ojo. Olvidemos la gamberrada de ETB, pero ahí tenemos a Telemadrid, permitan el grosero ejemplo, por no hablar de esa TVE ocupada militarmente por paniguados del PP en los puestos directivos. Acotemos el campo: se ruega que la sociedad se tome en serio esta indecencia de que algunos partidos aprovechen en su beneficio lo que es de todos.

Fuera descarados, fuera sicarios, fuera lacayos. Con mi dinero, no.

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