¿Quiénes son los miserables?
Madrid
Nos cuenta la OIT en su último informe que el 10% de los trabajadores con sueldos más altos acumulan la mitad del salario mundial. Y el 10% de los trabajadores más pobres tendrían que trabajar tres siglos, si viviesen, para ganar lo que gana en un solo años ese 10% de sueldos privilegiados. No compara a los hiperricos con el resto de los mortales, como lo hace Oxfam cuando nos cuenta que 26 personas en el mundo acumulan tanto dinero como los 3800 millones de personas más pobres. No, aquí la OIT compara asalariados.
La noticia no ha sido Trending Topic mundial, ni se ha hecho viral, ni ha abierto, en general, informativos o periódicos, ni ha provocado reuniones urgentes del G20, del FMI ni de la ONU. La escuchamos como quien oye llover en primavera, como quien contempla la inexorable caída del sol al atardecer. Y, sin embargo, en esa desigualdad, que no es sino un gran robo, están las raíces de muchos de los retos a los que se enfrenta nuestro mundo, convertido en una gran explotación habitada por miserables: unos, porque viven en la miseria; otros, porque la sostienen y se sirven de ella de manera canalla para sostener su inmenso negocio.