La muerte de George Orwell
Tal día como hoy hace 70 años murió de tuberculosis uno de los escritores más talentosos del siglo XX
Tienes que ser de una pasta especial para irte a luchar a una guerra civil de un país que no es el tuyo. Y aún más si lo haces con 33 años, cuando ya tienes la vida mínimamente encaminada. Esto y mucho más hizo George Orwell, que nos dejó tal día como hoy, hace 70 años.
Pocos escritores han marcado tanto el imaginario colectivo contemporáneo como Orwell, sobre todo a partir de su novela 1984, en la que nos introdujo conceptos como el Gran Hermano o la policía del pensamiento.
Pero más que novelista, Orwell, cuyo nombre real era Eric Blair, se había visto siempre como un defensor de los más débiles. Renunciando a su trabajo dentro de la administración imperial, recorrió Inglaterra explicando cómo eran las vidas de los más desafortunados. Desde los mineros del norte a las criadas del sur, pasando por todos los que vivían en la indigencia por las calles de Londres.
Sus vivencias lo hicieron ser un socialista convencido, y no dudó en ir a España para luchar por la República cuando esta tuvo que luchar por su supervivencia contra el fascismo. Pese a que vio con esperanza la sociedad libertaria de la Barcelona de 1936, también tuvo que vivir la desilusión de ver las luchas internas de la izquierda en mayo de 1937. Poco después, fue herido de bala en el cuello en el Frente de Huesca y volvió a Inglaterra antes del final de la guerra.
Sus experiencias en España y su visión crítica del estalinismo le llevaron a escribir Rebelión en la granja y 1984, sus obras más recordadas. Poco después del final de la Segunda Guerra Mundial, se agravó su tuberculosis, hasta que murió en 1950, con solo 46 años.
Había cogido la enfermedad mientras vivía como un indigente en París y en Londres, a principios de los años 30. Con su muerte, el mundo perdió a uno de los escritores con más talento y más principios del siglo XX.