Iñaki Gabilondo dice 'adiós' al micrófono: "Tengo la convicción de que ya se ha acabado"

Madrid

Iñaki Gabilondo se despide de los micrófonos en una entrevista muy emotiva con Aimar Bretos. El periodista y exdirector de programas insignes de la Cadena SER como 'Hoy por hoy' u Hora 25 ha querido decir "adiós", pese a que ya había comenzado su retirada "con discreción máxima", como él mismo apunta. "Hacerse mayor es un proceso de despedida. Voy a cumplir 79 años el mes que viene. Estaba claro que esto se acababa ya y me estaba aburriendo de mí", ha explicado.

En esta noche tan especial para Iñaki Gabilondo no han podido faltar dos de las periodistas que mejor conocen al periodista y que han compartido redacción con él: Mamen Mendizábal y Ana Pastor.

"No se puede decir mejor las cosas que él. No se puede defender mejor este país desde las ideas y el corazón. No se puede defender mejor el periodismo", decía Mendizábal sobre Gabilondo.

Por otro lado, sobre la vida política en España, el periodista ha sido claro: "Estamos en un momento en el que me sorprende que no se entienda que hacer oposición no es jugar a la demolición. Si eso es la democracia, yo me borro". Gabilondo, que dice adiós a la radio tras una inmensa trayectoria, ha cargado contra la actitud de la oposición; a la que ha calificado de destructiva.

Gabilondo ha sido claro: "Si la democracia es una operación que consiste en que la mitad de un país se dedica a destruir lo que la otra mitad construye... eso no es así. Estamos entendiendo como natural que la tarea de la oposición es demoler por sistema cada cosa que pasa. Eso me parece una aberración".

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Gabilondo dice 'adiós'

Estoy contento de estar aquí. Contento de que sea aquí donde podamos hacer el adiós. A esto vengo. Yo estaba como quería retirándome por la vía de la discreción máxima.

En Movistar sigo haciendo alguna cosa. Aquí cuando dejé de hacer los comentarios seguramente debería haberlo dejado todo. Forzamos un poco más en el 'Hoy por hoy', pero en mi corazón quedó claro que había llegado el fin.

Hacerse mayor es un proceso de despedida. Yo voy a cumplir el mes que viene 79 años. Yo tengo una gran curiosidad y alejarme y ver cómo lo hacéis. Estaba claro que esto se acababa ya, me estaba aburriendo de mi.

La democracia y España

Estoy profundamente preocupado por la atmósfera. La democracia es un juego de tensiones, se inventó para discrepar y es la esencia misma de la democracia, pero si no hay elementos en común no sirve. Hay cosas que no se pueden hacer sin acuerdo. Como no hay posibilidad de acuerdo las cosas más importantes las estamos dejando. El escepticismo me parece bien, pero me parece un pecado que se te avinagre de una manera cínica. Yo dije que no quería ser el cenizo de las 8:30.

Cada Gobierno plantea una política educativa que sabe que va a durar lo que dura la legislatura. Con el tema de Cataluña es bueno que se converse, pero ni el Gobierno actual ni el de Cataluña tienen capacidad para dar recorrido a los acuerdos. España es un país formidable, pero parece no estar fijándose en la fuerza transformadora, parece que seguimos jugando a los juegos tradicionales del pasado. Eso me produce mucho dolor, me produce pena.

España es un país que cuando ha tenido un proyecto ha asombrado al mundo. Se han producido unidades que han dado lugar a grandes cosas. Los Juegos Olímpicos. El mundo las observa con asombro, cuando no hay un proyecto se produce un juego centrífugo. Me sorprende que no entiendan todos, la oposición, que no estamos en un momento de hacer oposición a base de demolición, si la democracia va a ser así yo me borro. Vamos siempre a rastras.

La radio actual

Me parecía necesario alejarme, hay que animar a la sociedad. La vida no es fácil. La gente tiene apuros, tiene problemas. Yo creo que la radio lo está haciendo perfectamente. 

La radio de 2021 es la adecuada a la sociedad en la que estamos viviendo. A mí me parece que estamos desconcertados porque hemos perdido los oyentes. Este momento es más profundo, pero cuando la gente en España y en el mundo oía la radio en el mundo alrededor de la mesa, de pronto los teníamos ahí y al día siguiente desaparecieron. La radio vivió una época de vértigo y de pánico. La radio está en el coche, etc. Este es un momento más complejo, más profundo, pero tiene un poco de eso: la radio está haciendo su trabajo y al mismo tiempo anda buscando con cierto nerviosismo a oyentes que no sabemos dónde están.

Creo que el planteamiento de que hay dos radios diferentes es un disparate. Hay una cosa nueva, que es el podcast, que en realidad tiene 90 años y la radio informativa que sigue ahí. Las posibilidades de la radio se están multiplicando y variando, pero es muy peligroso creerse que la radio corresponde a un medio pasado. La radio es el único medio que opera en horas, minutos y días y que no reclama la atención de nadie. Si oyes la radio puedes hacer de todo. La radio te hace la segunda voz, si quieres la escuchas, si quieres la oyes. Unos nos están oyendo y otros nos están escuchando.

Quien trabaje en la radio debe entender la altura gigantesca de esta actividad. Te empapa hasta el final, el protagonista de la acción es el protagonista de la acción. 

La situación del periodismo y los medios de comunicación

Al periodismo le está afectando la estructura que lo sostiene, pero está aflorando una muchedumbre haciendo iniciativas periodísticas que a ver cómo crecen. La gente ha descubierto que el periodismo es imprescindible en defensa propia, antes a lo mejor no se había dado cuenta. Ya sabe que necesita pozos de agua potable informativa. En el momento en el que un aluvión de aguas de todo tipo. Las 'fake news' son una industria que sirve para envenear, intencionada. Hay que jugar limpio porque nos jugamos la vida.

La opinión es más barata, por eso hay más. Es más fácil que yo esté aquí sentado que enviar a alguien a Afganistán o de corresponsal. A mí me dijo un día el director del Washington Post que iba a contratar a un montón de redactores y yo no me lo creía. Sin darse cuenta se descubrieron eliminando a algunos y contratando a otros. Porque se han dado de bruces con la exigencia de máxima calidad. Porque ahora tienes que buscar al espectador y en ese sentido es muy importante que los medios de comunicación relean su historia de independencia y vinculaciones y aproximaciones y distancias con los poderes que en ocasiones han sido inadecuadas. Como no seamos entendidos como independientes vamos a tener problemas. 

A mí me han presentado como un señor que se tragaba la papillita de Polanco, González, etc. Ese juego se ha llevado tan lejos que se ha producido un descreimiento que hay que recolocar. En España nos gusta mucho no considerar legítimas las posiciones legítimas de los demás.

Su relación con la SER

La SER a mí me ha dado todo. Cada vez que he oído que se encendía la luz roja he sentido el calambre de un niño que soñaba con estar ahí. Yo creo que era como casi todos los niños porque todos querían vivir en Disneylandia. Era de una familia muy humilde que vivía alrededor de la radio las fascinaciones de España. La radio como creadora de imágenes mentales, cada palabra nos llenaba el mundo de color. Cuando pasaba todos los días delante de Radio San Sebastián es como si fuera Disneylandia. Yo no he sentido nunca una mayor de triunfo que cuando fui director de Radio San Sebastián.

Ahora mismo se están produciendo procesos de normalización. El primer Gobierno de la democracia no tenía ninguna mujer. Hemos asistido a un viaje muy transformador en la historia de España, un viaje maravilloso, es una gran oportunidad haber asistido a ello. 

En una actividad como esta tienes la sensación de que algo injusto ha pasado.