Cascos niega que Francia interviniera para modificar el rumbo del Prestige

El ministro de Fomento, Francisco Álvarez Cascos, ha asegurado que Francia no intervino para que el "Prestige" cambiara el rumbo tras el accidente, como publica hoy el diario "El País".

Álvarez Cascos, que presidía en Cádiz el inicio de las obras del vestíbulo de la nueva estación ferroviaria Tèrmino, ha desmentido, a preguntas de un periodista de la Cadena SER esta información, y ha añadido que la solución a la crisis del "Prestige" la tiene la Cadena SER.

Ante la pregunta de a quien debe creer la ciudadanía, Cascos ha contestado al periodista: "A quien a usted le dé la gana, esto es libre" A continuación, ha comenzado a criticar tanto a la SER como al diario El País: "La ciudadanía sabe que llevan ocho meses, la SER y El País, para decirnos donde debíamos haberlo llevado, y todavía no lo han dicho. Estamos deseando escucharles".

Cascos ha añadido que "estoy esperando el programa en el que digan: "Ya lo tenemos, había que llevar el barco aquí". Llevan ocho meses y no lo han conseguido". El ministro ha afirmado que el Gobierno hizo "lo único que se hace en el mundo. No hay precedentes de acercar un barco herido a la costa".

"QUE NO DESVÍE LA ATENCIÓN"

La respuesta a Cascos ha venido del presidente de la Asociación Española de Marina Civil, José Antonio Madiedo, que le ha pedido "que no siga intoxicando a la opinión pública". Según Madiedo, Cascos intenta "desviar la atención sobre el hecho concreto, que es que se produjo una actuación irresponsable y una decisión temeraria por parte del Gobierno, al alejar el barco".

El diario El País publicaba hoy que el prefecto marítimo francés, el almirante Jacques Gheerbrant, reveló en la comisión de investigación sobre la tragedia del Prestige creada en Francia que se pidió a España que cambiara el rumbo del barco tras el accidente.

El ministro de Fomento asegura que "Francia no pidió en ningún momento que el "Prestige" cambiara de rumbo", y sentencia, además, que la administración española actuó correctamente.

Asimismo, manifestó que "cada día que pasa es un elemento que refuerza el convencimiento de que la administración marítima española actuó correctamente y cada día que pasa es un dato más el que devalúa y descalifica las mentiras de los que se han empeñado en hacer de esta cuestión un motivo de erosión de la credibilidad del Gobierno".