Quince soldados muertos y 21 heridos al ser derribado un helicóptero estadounidense en Irak

Al menos quince soldados han muerto este domingo y otros 21 han resultado heridos al ser alcanzado un helicóptero militar estadounidense por uno de los dos misiles lanzados desde tierra cuando se dirigía al aeropuerto internacional de Bagdad, según un nuevo balance suministrado por el coronel Bill Darley, portavoz del Ejército de EEUU.

"Quince murieron y 21 resultaron heridos", afirmó Darley, confirmando que las víctimas eran soldados de la coalición militar liderada por Estados Unidos.

"A las 09:00 -hora local- (las 07:00 en España) un CH-47(Chinook) estadounidense de la Décimosegunda Brigada de la Aviación, que da apoyo a la 82 División Aerotransportada, se estrelló cuando se preparaba para aterrizar a 1,5 kilómetros de Faluya" (al oeste de Bagdad), señaló. "Se está realizando una investigación al respecto", añadió.

Se trata del ataque más sangriento contra las fuerzas de la coalición en Irak desde el anuncio por parte del presidente estadounidese George W. Bush del fin de las principales operaciones militares en el país árabe, el pasado 1 de mayo.

En el helicóptero, del modelo Chinook-47, viajaban un total de 36 personas, incluidos los cinco miembros de la tripulación.

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El helicóptero derribado volaba cerca de otro Chinook-47 en dirección al aeropuerto de Bagdad, desde donde salen los aviones militares, que entre otros servicios, llevan y traen a los soldados destacados en Irak.

Las víctimas mortales y los heridos estaban destinados en la base de Ridgeway, situada cerca de la localidad de Faluya, a unos 65 kilómetros al oeste de la capital iraquí y escenario frecuente de ataques contra las tropas estadounidenses.

En las proximidades del lugar donde se estrelló el aparato y mientras el personal estadounidense recogía los cuerpos de las víctimas, varias decenas de campesinos celebraban el ataque contra las fuerzas de Estados Unidos.

El proyectil fue disparado con una lanzadera, y, según indicaron fuentes militares, al parecer impactó en la parte posterior del Chinook-47.

Algunas de las víctimas quedaron atrapadas entre los hierros del fuselaje, en torno al que había desparramados pedazos de equipos y efectos personales de los pasajeros.

Ocho helicópteros Medivac, y el Chinook-47 que acompañaba al aparato abatido, aterrizaron y trasladaron a los muertos y heridos al hospital militar situado en el complejo del antiguo Palacio de la República, así como a otros centros médicos de las tropas de EEUU.

36 ATAQUES AL DÍA

Con las nuevas bajas asciende a 138 la cifra de soldados estadounidenses que han muerto desde el fin de la guerra en Irak.

Las fuerzas estadounidenses de la coalición que lidera EEUU son atacadas una media de 36 veces al día, lo que ha llevado a la Autoridad Provisional de Irak a plantearse una nueva estrategia, que incluye emplear a un mayor número de policías iraquíes en las labores de seguridad.

El presidente estadounidense, George W. Bush, advirtió el sábado de que la retirada de las tropas estadounidenses desplegadas en Irak daría "alas a los terroristas", por lo que aseguró que Washington está "determinado" a permanecer en Irak "para luchar y para vencer", en su discurso radiofónico semanal.

Mientras, el administrador civil estadounidense en Irak, Paul Bremer, estimó que el ex presidente iraquí Sadam Husein está "vivo y en Irak" y su captura es "nuestra principal prioridad", al tiempo que prometió que la coalición va a "acelerar" la transferencia del poder a los iraquíes.