EEUU creará un grupo paramilitar para capturar insurgentes en Irak

Washington

Las autoridades civiles y militares estadounidenses presentes en Irak han decidido formar una unidad paramilitar compuesta por milicianos procedentes de los cinco mayores partidos políticos del país, con el objetivo de identificar y perseguir a los miembros de la resistencia, según informa hoy el 'The Washington Post'.

Estas cinco formaciones aportarán un total de entre 750 y 850 milicianos, que constituirán un nuevo batallón antiterrorista integrado en los cuerpos de la defensa civil iraquí y que operará en principio en los alrededores de Bagdad, según informaron fuentes militares citadas por el rotativo. Las fuerzas especiales norteamericanas trabajarán con este batallón, cuyas operaciones serán supervisadas por el mando estadounidense, precisaron las mismas fuentes.

Los dirigentes de cada una de las cinco partes supervisarán la formación de la fuerza paramilitar, un órgano al que en principio se oponían las fuerzas de ocupación. En todo caso, a juicio del 'Post', su creación supone un reconocimiento de que la Administración de George W. Bush no ha sido capaz de restaurar la seguridad mediante su estrategia de vinculación entre la Policía iraquí y las fuerzas de la defensa civil.

Según el 'Post', los cinco partidos que participarán en esta milicia paramilitar son el Movimiento para el Entendimiento Nacional (MEN), el Congreso Nacional Iraquí (CNI), la Asamblea Suprema de la Revolución Islámica en Irak (ASRII), el Partido Democrático del Kurdistán (PDK) y la Unión Patriótica del Kurdistán (UPK)

Los miembros de la nueva milicia, que seguramente pasarán una criba para determinar sus posibles relaciones con el antiguo partido gubernamental Baaz, estarán equipados con armas ligeras y vehículos, estarán divididos en cinco compañías y recibirán instrucción al menos durante más de un mes, incluida la formación en Derechos Humanos, precisaron las mismas fuentes.

RECELOS DEL CONSEJO TRANSITORIO

Algunos miembros independientes del Consejo de Gobierno Transitorio han mostrado sus recelos hacia este cuerpo paramilitar y su temor a que los partidos se valgan de èl y de sus antiguos milicianos integrados en el batallón, una vez que termine la ocupación norteamericana, para presionar en sus luchas por el poder.

Un jefe tribal, Ainsi Ghazi Ajil al Yauar, ha calificado la iniciativa de "gran torpeza". "Lo que deberíamos hacer es disolver las milicias y no buscar la forma para legalizarlas", afirmó este miembro independiente del Consejo.

Las fuerzas norteamericanas han rechazado estas críticas y han asegurado que los paramilitares "deberán dejar su identificación política en la puerta" y que su selección será realizada escrupulosamente para garantizar su lealtad hacia el mando unificado y no hacia los diferentes líderes políticos.