Zapatero propone en la cumbre contra el hambre la cesión del 0,7% del PIB

El presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, ha defendido en la cumbre contra el hambre que se ha celebrado en Nueva York el objetivo de que cada país destine el 0,7 por ciento del PIB a la cooperación internacional para combatir la pobreza. Horas antes del inicio de la cumbre expresó en la "zona cero" de Nueva York la solidaridad de España con Estados Unidos ante lo ocurrido el 11-S y reiteró que la ley y la democracia son el mejor camino para luchar contra el terrorismo.

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, recordó hoy durante su intervención en el Encuentro de Líderes Mundiales para la Lucha contra el Hambre y la Pobreza el compromiso de su Gobierno en duplicar la Ayuda Oficial al Desarrollo hasta alcanzar el 0,5% del Producto Interior Bruto (PIB).

El Gobierno español se ha comprometido y "está decidido a incrementar la ayuda oficial al desarrollo con arreglo a un calendario aplicable a partir del primer año de mandato", señaló. Zapatero aseguró además que de ser elegido como presidente para un segundo mandato prevé que dicha ayuda alcance el 0,7% en su segunda legislatura, reivindicación que formaba parte del programa electoral del PSOE.

El presidente español inició su discurso en este encuentro destacando la oportunidad de la iniciativa en la lucha contra el hambre y la pobreza, algo que calificó de "prioridad al más alto nivel político de la Agenda Internacional". "Debemos asumir con todas sus consecuencias los objetivos pactados en la Cumbre del Milenio", así como los compromisos financieros acordados en Monterrey.

LA EXPERIENCIA ESPAÑOLA

La iniciativa de la cumbre del Hambre, que ha contado con la presencia del presidente galo, Jacques Chirac, el chileno Ricardo Lagos y el secretario general de la ONU, Kofi Annan, además de Zapatero, está auspiciada por el presidente brasileño Luiz Inácio Lula Da Silva.

La aportación española a esta iniciativa ha consistido en la sugerencia de que, junto a otros instrumentos, se considere la manera de facilitar el flujo internacional de las remesas de los emigrantes.

El presidente español aludió al pasado de España en materia de emigración y aseguró que si bien es hoy un país de inmigración y "por tanto de emisión de remesas, no hace muchos años los españoles èramos todavía emigrantes y en aquellos tiempos difíciles las remesas del extranjero cambiaron la vida de muchas familias".

Así, Zapatero explicó que España sabe que es posible reducir la pobreza y promover un desarrollo humano sostenible basado en un crecimiento con equidad, el respeto al medio ambiente, la igualdad de derechos para hombres y mujeres, la libertad y el respeto a la diversidad cultural".

Horas antes a este encuentro, Rodríguez Zapatero, acompañado por su esposa, Sonsoles Espinosa, visitó el lugar en el que se levantaban las Torres Gemelas en un acto previo a su intervención en la Cumbre Contra el Hambre y en la 59 Asamblea General de Naciones Unidas.

Fueron recibidos en la "zona cero" por la hermana del alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, encargada de las relaciones de la ciudad con Naciones Unidas, y escucharon las explicaciones sobre la evolución de las obras en ese lugar.

Tras realizar la ofrenda de un ramo de rosas rojas y amarillas, colores de la bandera de España, ante el listado con el nombre de cada una de las casi 2.800 personas que fallecieron en esos atentados, Zapatero subrayó que "el mejor camino" para combatir el terrorismo es "con la fuerza de la ley, con la democracia", y que sólo este "puede evitar en el mundo que la violencia crezca en lugar de reducrise y que el fanatismo aumente".

Rodríguez Zapatero se estrenará ante la Asamblea de la ONU con un discurso en el que presentará la nueva política exterior española, fundamentada en el respeto a la legalidad internacional y la defensa del "multilateralismo efectivo".

En ese contexto se prevé, según fuentes del Gobierno, que aborde la actual situación en Irak y Oriente Medio, y haga un llamamiento a la reflexión para que la comunidad internacional busque una solución urgente a estos conflictos.

La lucha contra el terrorismo será otra de las referencias de la intervención del jefe del Ejecutivo español, en la que apostará además por una mayor justicia social. Además, detallará la propuesta española para la reforma del Consejo de Seguridad de la ONU, que no implicará un aumento del número de países miembros de este organismo con carácter permanente, que en la actualidad asciende a cinco.