El presunto 'asesino de la baraja' se niega a declarar en el comiezo del juicio
Alfredo Galán está acusado de seis asesinatos y otros tres en grado de tentativa
Alfredo Galán, que en 2003 se autoinculpó en los crímenes atribuidos al "asesino de la baraja" y que posteriormente se retractó, se negó hoy a declarar en el juicio que comenzó contra él en la Audiencia Provincial de Madrid. El fiscal pide 151 años y dos meses de cárcel para el ex militar Alfredo Galán por seis delitos de asesinato consumado, tres asesinatos en grado de tentativa, un allanamiento de morada y tenencia ilícita de armas. Además, el ministerio público solicita que Galán indemnice con más de tres millones de euros a los familiares de sus presuntas víctimas.
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Tra la negativa de Galán a declarar, el presidente de la Sección 16 de la Audiencia Provincial acordó que se lean las declaraciones prestadas por aquél en la fase de instrucción ya que, según dijo, se hicieron de forma voluntaria y asistido de letrado, por lo que consideró que no había lugar a la suspensión de la vista oral solicitada por una de las acusaciones.
Los hechos que se le imputan al presunto 'asesino de la baraja' ocurrieron entre enero y marzo de 2003. El 3 de julio de aquel año Alfredo Galán, un ex militar que había solicitado la baja del Cuerpo, se entregó a la policía de su ciudad natal, la localidad de Puertollano, en Ciudad Real, y aseguró ser el autor de los crímenes.
El primer asesinato que se le atribuye ocurrió el 24 de enero de 2003 en la calle de Alonso Cano de la capital. El asesino entró en el portal del número 89 y tiroteó al portero de la finca, en presencia de su hijo de dos años. El 5 de febrero, asaltó a un joven cuando éste esperaba en una parada de autobús en la Alameda de Osuna; le obligó a ponerse de rodillas de cara a un árbol y le disparó en la cabeza. Horas más tarde, acudió al bar Rojas de Alcalá de Henares y allí tiroteó a la propietaria del local, a su hijo y a una cliente. Los dos últimos fallecieron en el acto y la primera quedó gravemente herida.
El 7 de marzo el presunto asesino del naipe volvió a aparecer disparando a una pareja de amigos en una calle de tres cantos. Al chico le dejó gravemente herido y cuando encañonó a la joven se le encasquilló el arma y huyó. Sus últimas víctimas fueron un matrimonio rumano, a quienes disparó a bocajarro en un descampado de Arganda del Rey.
En septiembre de 2003, y en contra de lo que había dicho inicialmente, Galán se declaró inocente e inculpó a dos cabezas rapadas que, según aseguró, le habrían amenazado de muerte para que se entregase a las autoridades. Pese a la terrible situación familiar por la que atraviesan las familias, el abogado José María Garzón, que representa a dos de ellas, asegura que afrontan el juicio con esperanza.
Los crímenes atribuidos a Galán fueron conocidos como los del "asesino de la baraja", porque en varios casos colocó junto a los cuerpos sin vida de sus víctimas un naipe. Está previsto que el juicio, que se celebrará en la sección decimosexta de la audiencia provincial, dure tres semanas.