Canadá aprueba el matrimonio homosexual
Es el tercer país en el mundo que lo hace
El mismo día en que se celebra el Día Internacional del Orgullo Gay, Canadá se une a los países pioneros en legalizar el matrimonio entre personas del mismo sexo. Esta tarde, el Parlamento canadiense obvió la fiera oposición de los conservadores y los grupos religiosos y aprobó la ley con 158 votos a favor y 133 en contra. Se convierte en el cuarto país del mundo en permitir las bodas gays, después de Bélgica, Holanda y España.
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No es un paso rompedor en el país norteamericano, pues la mayoría de las regiones canadienses ya permitía los matrimonios entre personas del mismo sexo. De hecho, Canadá es un popular destino para las parejas de gays y lesbianas procedentes de países donde estas uniones están prohibidas. Van a decirse el "sí, quiero", aunque a la vuelta a casa los papeles no les sirvan de nada.
La postura de Canadá sobre ésta y otras cuestiones sociales contrasta con la situación en el vecino Estados Unidos. Allí, el presidente George w. Bush quiere sacar una ley estatal que prohíba las uniones (denominadas matrimonios o no) a las personas del mismo sexo.
"Somos una nación de minorías y en una nación de minorías es importante no limitar los derechos. Un derecho es un derecho y eso es lo que estamos tratando esta noche", argumentó el primer ministro canadiense, Paul Martin, antes de la votación parlamentaria.
Los grupos religiosos, en contra
Grupos religiosos y el principal grupo conservador en la oposición, han reiterado que la ley es contraria a la religión y que puede ser la puerta de entrada a la legalización de la poligamia. También temen posibles demandas judiciales a los religiosos que no accedan a casar a parejas del mismo sexo. La ley es clara en este aspecto: permite el matrimonio civil pero no obliga a las iglesias a casar a estas parejas.
Algunos parlamentarios liberales comentaron sus miedo a que la ley les dificulte la reelección en los próximos comicios, que se celebran a principios de año. De hecho, el lider conservador Stephen Harper ya ha amenazado con que la lucha contra el matrimonio homosexual será uno de los temas de su campaña.
Pero la postura adoptada por Harper también podría jugar en su contra. Los Liberales ganaron elecciones en 2000 y 2004 en parte porque convencieron a los abiertos canadienses de que sus rivales de la derecha son unos extremistas que recortarían los derechos civiles en caso de ser elegidos.