El Gobierno aprueba la reforma educativa, la sexta de la democracia

Madrid

El Consejo de Ministros aprobó hoy la remisión al Congreso del proyecto de Ley Orgánica de Educación, que incluye una memoria económica en la que se valoran unas necesidades para los próximos cinco años de más de 6.000 millones de euros adicionales al gasto actual en educación, y en el que la Administración Central del Estado se compromete a cubrir en un porcentaje del 55 por ciento.

Entre otras medidas, la reforma deroga leyes educativas anteriores como la LOGSE y la LOCE, mantiene la repetición de curso, una vez en Primaria y dos en Secundaria, y los alumnos pasarán de curso si suspenden una o dos materias; si son tres, decidirá el claustro, y repetirán si son mas los suspensos. En Secundaria Obligatoria los centros arbitrarán mètodos que tengan en cuenta los diferentes ritmos de aprendizaje, y se unifica en una sola prueba el acceso a la Universidad.

En la rueda de prensa posterior al Consejo, la ministra de Educación y Ciencia, Maria Jesús San Segundo, destacó que los objetivos tienen mucho que ver con los aumidos a escala de la UE en la agenda de Lisboa para mejorar la formación del capital humano, y enfatizó la necesidad de mejorar resultados académicos en la enseñanza básica. Asi, se repita o no curso, toda asignatura suspendida deberá llevar recuerpación con evaluación, y se procederá a programas de calidad tanto en primaria, ya iniciados, como en secundaria.

La asignatura de religión

Sobre el rango de la asignatura de religión, la vicepresidenta primera del Gobierno, Maria Teresa Fernández de la Vega, subrayó que la reforma garantiza la libertad para que los padres que quieran que sus hijos estudien y libertad para padres que no quieren que sus hijos estudien religión, pero advirtió de que "la religión no se debe imponer en la escuela como una asignatura obligatoria ni evaluable", y que la asignatura no debe condicionrr el futuro de los estudiantes.

Por su parte, la Conferencia Episcopal ha hecho público un comunicado en el que expresa su desacuerdo con el proyecto de Ley Orgánica de Educación (LOE), aprobado por el Gobierno porque "pone seriamente en peligro la enseñanza de la religión en la escuela" y "recorta el derecho de los padres a decidir sobre la educación de sus hijos de acuerdo con sus creencias religiosas".

Gratuidad de tres a cinco años

De la Vega destacó especialmente medidas como la gratuidad de la enseñanza para los niños de 3 a 5 años, la promoción de la participación de la comunidad educativa en el proceso de decisión de los centros, o el detalle de la viabilidad económica de los cambios propuestos. Subrayó ademas que el proyecto es fruto de un año de "intenso debate" y que se han tenido muy en cuenta opiniones diversas de la comunidad educativa.