Un tiroteo dentro del estadio de Nueva Orleans obliga a suspender la evacuación

La administración ha puesto en marcha una enorme operación para evacuar a las miles de personas atrapadas en Nueva Orleans mientras se ha acrecentado el peligro de enfermedades. Sin embargo, los saqueos y los tiroteos, el último dentro del estadio donde se congregan más de 20.000 atrapados, han hecho que las labores de rescate se paralicen. El alcalde de la ciudad, ha lanzado un SOS desesperado desde el Centro de Convenciones. Las críticas contra Bush y la gestión del Gobierno en la catástrofe comienzan a ser cada vez más numerosas.

El alcalde de Nueva Orleans ha emitido un correo electrónico desde el Centro de Convenciones de la ciudad en el que ha lanzado un SOS desesperado para que se palíe la situación de las miles de personas que allí se encuentran atrapadas. Asegura que les falta comida y que no hay suficientes autobuses para evacuarles. En este lugar se encuentra la diputada española, Lourdes Muñoz, junto a su familia.

"Este es un SOS desesperado. Ahora mismo no tenemos recursos en el centro de convenciones y no nos han anticipado autobuses suficientes. Ahora mismo el Centro de Convenciones es insalubre e inseguro y nos estamos quedando sin alimentos para entre 15.000 y 25.000 personas", aseguró el alcalde Ray Nagin en el correo leído por la CNN.

Asaltos a comisarías

La operación para llevar en autobús a más de 20.000 personas de Nueva Orleans al estadio Astrodome de Houston ha sido temporalmente suspendida por los tiroteos sufridos por los helicópteros que participan en la evacuación.

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"Nos han aseguardo que están disparando a los helicópteros Chinook y la operación se ha pospuesto hasta que amanezca", aseguró Gloria Roemer, portavoz del juez del Condado de Harris.

Según informa el corresponsal de la SER, José Antonio Ponsetti desde Miami, se están produciendo asaltos a las comisarías y la población se encuentra aterrada. Los equipos de rescate y de ayuda se muestran incapaces de montar los campamentos base para coordinar las operaciones ya que son asaltados por incontrolados que les roban.

Vista la situación, el rescate se paralizará hasta que la ciudad esté literalmente tomada por el ejército. 10.000 soldados se dirigen a Nueva Orleans para tratar de recuperar la seguridad. En las entradas hay 1.700 camiones con comida y ropa esperando que eso ocurra para poder entrar.

Arrecian las críticas

Dice hoy una analista en el New York Times que Bush no se ha visto en otra situación igual de comprometida desde que permaneció sentado en una escuela de Florida mientras el World Trade Center ardía a mil millas de allí el 11-S.

Ahora, para agravar la situación, Bush está en su cota más baja de popularidad (apenas el 45%), con su capital político agotado por la sangría, en vidas y en dinero, de la guerra de Irak.

Las críticas se focalizan en la incapacidad de previsión y de reacción del gobierno, además de en la tardanza de Bush en suspender sus vacaciones. Además, los diques de Nueva Orleáns tenían que haberse reparado el año pasado y no se ha hecho. Decía el responsable de la gestión de emergencias de esa ciudad que seguramente el dinero se había dedicado a la seguridad interna y a la guerra en Irak.

70.000 sin techo

La delegada de Cruz Roja en la zona ha asegurado que este es el despliegue en recursos más importante de la sección americana. Según la portavoz de la ONG, han desplegado hasta 279 recuersos operativos y se encuentran alimentando y dando refugio a 70.000 afectados.

Algunos de los evacuados ya han comenzado a llegar a la ciudad de Houston en Texas. Pero la operación, tiroteos aparte, se prevé larga y compleja ya que también existen problemas con alrededor de 10.000 enfermos que esperan ser trasladados a hospitales de los estados vecinos.