El 80% de la población se concentra ya en sólo el 12% de los municipios
El litoral urbanizado supera ya el 50% de la longitud de costa de Málaga, Barcelona y Alicante
España es cada vez más un país urbano con fuertes desequilibrios territoriales, en el que casi el 80% de la población se concentra ya en sólo el 12% de los municipios. Según el "Perfil Ambiental de España 2005" que elabora el Ministerio de Medio Ambiente, en el litoral, la superficie urbanizada en el primer kilómetro de costa ha aumentado mucho y en varias provincias (Málaga, Barcelona y Alicante) el litoral urbanizado supera ya el 50% de su longitud de costa.
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En el informe se pone de manifiesto además que crece el volumen de residuos, que subsisten las amenazas sobre ecosistemas terrestres y marinos, que disminuye la capacidad de pesca o que el transporte continúa siendo "insostenible".
Del "perfil" ambiental se deduce que España mantiene un crecimiento económico que mejora la calidad de vida de los ciudadanos, pero constata que ese proceso lleva aparejado un aumento de la urbanización y un uso intensivo de los recursos y que aumenta la presión sobre el medio ambiente.
Aumentan las emisiones de dióxido de carbono y España se aleja del cumplimiento de los objetivos del Protocolo de Kioto de lucha contra el cambio climático y las mejoras técnicas introducidas en los vehículos no consiguen compensar el crecimiento del transporte.
Frente a esos indicadores, el estudio apunta "señales para la esperanza" y valora la tendencia que muestran algunos indicadores. Crecen por ejemplo los espacios protegidos, aumenta la depuración de aguas residuales y mejoran por lo tanto la calidad de los ríos de los acuíferos y las aguas litorales, aumentan también la agricultura ecológica, el reciclaje de residuos urbanos, las empresas con certificación ambiental y el uso de energías renovables.
El estudio refleja que aumentan los residuos y que en 2003 se superó por primera vez la barrera de 500 kilos por habitante y año, aunque aumento el reciclado y disminuyó la utilización del uso de vertederos.
Aunque aumentan los espacios naturales protegidos, disminuye el número de árboles sanos y empeora el estado general de los árboles, y casi el 14 por ciento de los vertebrados españoles presenta algún grado de amenaza, en especial las aves, los mamíferos y los reptiles.
