Se cumplen 25 años del regreso del Guernica a España

"Es una obra maestra del mayor artista del siglo XX, que denuncia magistralmente el horror de la guerra y de las víctimas inocentes. Es un símbolo universal, patrimonio de la humanidad", dijo Ana Martínez de Aguilar, directora del Museo Reina Sofía, donde el lienzo se custodia y se expone desde 1992.

Lo pintó Picasso en París, en su buhardilla del número 7 de la rue des Grands Augustins, y con él el artista malagueño respondía al encargo que el Gobierno de la República le había hecho para el Pabellón de España dentro de la Exposición Universal de la capital francesa de 1937.

El primero de mayo, apenas cuatro días después de que Guernica y su población civil indefensa fueran arrasadas por la aviación alemana, aliada de Franco, Picasso comenzó el cuadro, que terminó algo más de un mes después, el 4 de junio siguiente. Se trata de un cuadro que expresa un enorme dolor y una intensa violencia sin una sola lágrima. Refleja el horror que sufrió el pueblo inocente.

El 'Guernica', por voluntad expresa de su autor, sólo pudo pisar suelo español en 1981, seis años después de la muerte de Franco y cuando la vida política nacional daba garantías de discurrir por fin por buen camino.

Aquel mítico regreso estuvo precedido durante años de frecuentes titulares de prensa que informaban de las negociaciones con los herederos del pintor y con el MOMA, el museo neoyorquino al que había sido confiado en depósito por motivos de seguridad por el propio autor tras el estallido de la Segunda Guerra Mundial.

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El cuadro, que se exhibió con la inscripción "Bajo préstamo del pueblo español", fue cedido ya simbólicamente en 1978 al Rey por iniciativa de Jacqueline, la viuda de Picasso, aunque sólo se supo dos años más tarde. Después de años de negociaciones, el encargado de cerrarlas con éxito sería el desaparecido Javier Tusell, director general de Patrimonio Artístico en el último gobierno de UCD.

Su vuelta fue seguida por las largas colas que durante mucho tiempo se estuvieron formando ante el Casón del Buen Retiro, donde fue colocado entre fuertes medidas de seguridad, por toda la gente deseosa de ver una obra cargada de significado artístico y político que, finalmente, sería llevada al Reina Sofía en 1992.

Para celebrar este regreso, el museo Reina Sofía de Madrid deja entrada gratuita para visitar la exposición sobre Picasso.