Destituidos el jefe de campaña de Lula y el director del Banco de Brasil por presunta corrupción
Escándalo político a diez días de las elecciones
Un nuevo escándalo en Brasil, a diez días de las elecciones, ha causado ya cinco bajas en el entorno del presidente Luiz Inácio Lula da Silva y su partido, incluidas la de Ricardo Berzoini, hasta hoy su jefe de campaña y la del presidente del Banco de Brasil.
Ricardo Berzoini fue salpicado por la supuesta negociación de un dossier con informaciones falsas que implican en casos de corrupción a candidatos opositores para las elecciones del 1 de octubre. Su lugar será ocupado por Marco Aurelio García, vicepresidente del PT y asesor de la Presidencia de la República para Asuntos Internacionales.
Más información
- Lula convocará un "gran pacto nacional" si gana las elecciones
- Lula rechaza acudir al último debate televisado antes de las elecciones del domingo
- Lula tendrá que disputar la presidencia de Brasil con Alckmin en una segunda vuelta
- El presidente del partido de Lula deja su cargo tras el escándalo del falso dossier
- Lula, investigado por divulgar datos falsos de sus opositores
El escándalo comenzó el pasado viernes, cuando la policía detuvo a dos personas vinculadas al PT con cerca de 1,7 millones de reales (casi 800.000 dólares) en efectivo que intentaban negociar la compra del dossier con supuestas pruebas contra candidatos de la oposición.
Esas pruebas implicarían a Geraldo Alckmin y José Serra, respectivamente candidatos a la Presidencia y a la gobernación del estado de Sao Paulo por el Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB).
El informe fue preparado por un empresario vinculado a una mafia que vendió mil ambulancias al Estado mediante licitaciones amañadas y créditos concedidos en forma fraudulenta, un caso por el que están bajo sospecha unos 80 diputados de diez partidos políticos.
Además de Berzoini y Freud Godoy, han caído Jorge Lorenzetti, un analista de medios que trabaja en la campaña de Lula, sospechoso de haber gestionado parte del montaje y que es íntimo amigo del mandatario.
Por otra parte, el estatal Banco do Brasil informó hoy de que el director de gestión de riesgos, Expedito Afonso Veloso, dimitió, tras ser implicado también en el asunto y sospechoso de haber entregado el dinero para comprar los documentos.
También hoy fue cesado el coordinador de comunicación en la campaña de Aloizio Mercadante, candidato del PT a gobernador del estado de Sao Paulo, igualmente salpicado por el asunto.
El escándalo le ha dado pólvora a la oposición para alimentar sus críticas al gobierno y en especial a Lula. La más agresiva ha sido Heloisa Helena Lima, candidata del izquierdista Partido Socalismo y Libertad (PSOL), expulsada del PT en el 2003, quien sostuvo que Lula "es el gran comandante" de una "organización criminal capaz de robar, matar y liquidar a quien pase por delante y amenace su proyecto de poder".
La justicia electoral ha iniciado una investigación para establecer la responsabilidad en el escándalo tanto de Lula y de Berzoini, como del ministro de Justicia, Marcio Thomaz Bastos.
