Los médicos de Pinochet se defienden de las acusaciones de montaje

El equipo médico que atiende a Augusto Pinochet ha explicado esta madrugada en una rueda de prensa la rápida recuperación del ex dictador chileno, que el pasado domingo sufrió un ataque agudo de miocardio y hoy ya se levanta de la cama, y han rechazado tajantemente la tesis de un montaje.

Los doctores Rodrigo Águila, cardiólogo jefe del hospital militar, y Juan Ignacio Vergara, jefe del equipo médico, han asegurado que la crisis de salud del dictador fue real. "No estaríamos presentes aquí (en la conferencia de prensa) si hubiéramos creado un montaje. Evidentemente, como personal médico, hemos actuado en forma profesional como corresponde a cualquier médico", ha dicho Vergara.

"Si un enfermo es revascularizado a tiempo y uno evita pérdida de masa ventricular, masa del corazón, y queda con una función contráctil del corazón razonable, el enfermo se empieza a movilizar en forma precoz", dijo el médico que operó a Pinochet de una angioplastia, Rodrigo Aguila. Los profesionales han afirmado que el ex comandante en jefe del Ejército, de 91 años, se encuentra en condiciones favorables y que no requiere de ningún tipo de asistencia médica especial.

"No tiene ninguna atención de la unidad coronaria y está sin apoyo especial, sólo con hidratación, alimentación oral y con sus medicamentos de prevención de embolia y de trombosis", han afirmado los médicos.

Sin embargo, no han querido referirse a la recuperación como un "milagro", como afirma la familia del dictador, y la han atribuido a la rápida atención médica que recibió. La positiva evolución de Augusto Pinochet le ha permitido levantarse de su cama, y será trasladado a una habitación.

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