Royal y Bayrou movilizan Francia para evitar una Asamblea monocolor
Quedan siete días para la primera vuelta de las elecciones legislativas
A siete días de la primera vuelta de las elecciones legislativas, la prensa francesa se pregunta "¿dónde está la campaña?". La neta victoria de Nicolás Sarkozy en las recientes a la presidencia de la República van a convertir esta nueva cita electoral en una marcha militar para las tropas de su formación política: la Unión por un Movimiento Popular, la UMP.
Los dos últimos sondeos, atribuyen una amplia mayoría a esta formación de centro-derecha con más de un 40% de intención de voto lo que le supondría obtener entre 420 y 460 diputados de un total de 577.
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Una aplastante mayoría absoluta contra la que pretenden luchar los dos exrivales de Sarkozy en las presidenciales: la socialista Ségolène Royal que pese a no presentarse para renovar su acta de diputada hace campaña activa con la intención de hacerse con las riendas del partido y traducir en diputados el 27% que obtuvo de respaldo. El centrista François Bayrou denuncia la falta de pluralismo de la que adolecerá la próxima Asamblea Nacional, al tiempo que intenta conseguir un número mínimo de diputados que garanticen la supervivencia económica, vía subvenciones oficiales, para su nuevo partid: el MODEM.
En cualquier caso, lo que si parece seguro es que la nueva Asamblea Nacional será como la anterior mayoritariamente masculina y de raza blanca. Tanto la UMP como el PS han primado respaldar a los diputados salientes y dejan así, en agua de barajas, el incremento de candidaturas femeninas y de la diversidad racial del país.
