El primer ministro británico anuncia "grandes progresos" en la investigación sobre los atentados frustrados

El primer ministro británico, Gordon Brown, ha concedido a la cadena BBC una entrevista, la primera desde su recién estrenado mandato. Brown ha abordado la situación de alerta máxima que vive el país tras los atentados frustrados del pasado jueves —el hallazgo de dos coches bomba en Londres— y de ayer, sábado, en Glasgow, cuando dos indiviudos estrellaron un coche contra el aeropuerto.

Brown ha señalado que las fuerzas de seguridad están haciendo grandes progresos en la investigación, además ha acusado a Al Qaeda de estar detrás de estos intentos de ataques en Londres y Glasgow y ha insistido en que el país afronta una amenaza terrorista constante y de larga duración.

El líder laborista atribuyó los ataques a "un grupo de personas no sólo en este país sino en todo el mundo que está dispuesta a hacer el máximo daño a los civiles" para lograr sus objetivos.

"Sabíamos que nos enfrentamos a una amenaza que no va a desaparecer en las próximas semanas o meses", ha dicho el primer ministro británico, quien ha asegurado que se van a emplear distintos medios para afrontarla: policiales, militares y de los servicios de inteligencia.

Ganarse "los corazones" de los musulmanes

Asimismo, esa respuesta no puede ser sólo militar, policial y de seguridad, sino que debe incluir, según Brown, medidas para ganar "los corazones y las mentes" de los musulmanes y separar a los extremistas de la mayoría respetuosa de las leyes.

Además, ha anunciado en la entrevista que el lunes hará una declaración en el Parlamento sobre la situación de la seguridad nacional. Así, lugares como aeropuertos van a sufrir sistemas de seguridad exhaustivos. Por último, ha pedido a la ciudadanía que colabore pero que mantenga la calma y su vida normal.

Brown proclamó que los británicos no claudicarán ni se dejarán intimidar y que nadie conseguirá "socavar nuestro estilo de vida británico".