La hija de Berlusconi critica a su padre por el escándalo sexual
Los comentarios de Barbara son otro golpe a la imagen de Berlusconi, cuya imagen ha sufrido una caída en popularidad tras los escándalos del verano
La hija del primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, ha dicho que estaba sorprendida por la atención que su padre había prodigado a una modelo adolescente, en una inusual crítica de uno de sus hijos al líder proclive al escándalo.
Barbara Berlusconi, de 25 años, también dijo a Vanity Fair que los políticos debían acatar en sus vidas privadas los valores que predican públicamente, en contraste con los aliados de Berlusconi, que dicen que su vida privada no guarda relación con su papel público.
Más información
- Los nombres de los escándalos sexuales de Berlusconi
- Recogen 115.000 firmas contra Berlusconi por atacar la libertad de prensa
- Patrizia D'Addario aporta pruebas sobre sus encuentros con Berlusconi
- Berlusconi: "No soy un santo"
- 'L'Espresso' publica dos nuevas conversaciones entre Berlusconi y Patrizia D'Addario
- Dimite el director del diario de los obispos italianos tras los ataques del periódico de Berlsuconi
- Vanity Fair publica una lista de los más elegantes y mejores vestidos del mundo
- Berlusconi anuncia un plan para luchar contra las fuerzas del mal, la mafia y el crimen
Berlusconi, de 72 años, ha negado haber mantenido una relación indecorosa con Noemi Letizia tras aparecer en el 18 cumpleaños de ella con un collar de 6.000 euros de regalo, lo que llevó a su mujer, Verónica, a pedir el divorcio por su afición a las mujeres.
Sin nada que decir
Cuando se le preguntó si pensaba que las atenciones que su padre había tenido con Letizia, Barbara dijo: "Me quedé anonadada. Es algo que nunca ha formado parte de mi vida".
"Nunca he frecuentado a hombres mayores. No tengo experiencia de tales relaciones psicológicas", dijo a la revista.
Desde el escándalo con Letizia, Berlusconi también ha esquivado acusaciones de que pagó a chicas para que fueran a sus fiestas. El dirigente ha negado haber pagado a cambio de sexo, pero dice que "no es un santo".
"Los representantes políticos a los que se pide que gobiernen bien, y hagan una sociedad próspera, deberían también salvaguardar los valores que expresan", dijo Barbara a la publicación.
"Así que no creo que se pueda permitir a un político una distinción entre su vida pública y privada", añadió.
Otro golpe para Berlusconi
Los comentarios de Barbara son otro golpe a la imagen de Berlusconi, cuya imagen ha sufrido una caída en popularidad tras los escándalos del verano. Pero aún así disfruta de un apoyo del 49% de los italianos y una mayoría cómoda en ambas cámaras del Parlamento.
Barbara es una de los tres hijos que Berlusconi tuvo con Veronica. Sus dos vástagos del primer matrimonio ostentan destacados puestos en su imperio empresarial. Apenas hablan en público, pero defendieron a su padre cuando surgió el escándalo en mayo.