Graziano Da Silva: "A los hambrientos no les puedo pedir que esperen"

La ONU ha declarado esta semana la situación de hambruna en dos regiones del sur de Somalia. Hemos querido analizar con Graziano Da Silva la situación que se vive en el Cuerno de África y saber qué acciones tiene previstas la FAO en la región. Se trata de la primera entrevista del nuevo director de la FAO a un medio español desde que fue elegido el pasado mes de junio.

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Naciones Unidas declararó este miércoles oficialmente situación de hambruna en dos regiones del sur de Somalia, Bakool y Bajo Shabele, una circunstancia que no se daba en este país del Cuerno de África desde 1992. José Graziano Da Silva asegura que "es una más de las situaciones que se viven en Africa" y explica porqué se ha llegado a esa situación: "Allí se concentran los peores elementos que se pueden reunir... problemas naturales (una sequía recurrente de varios años) y, sobre todo, un conflicto humano, una guerra civil que va y viene, que ha debilitado a esa población ya completamente pobre".

José Graziano Da Silva venció a Miguel Ángel Moratinos el pasado 26 de junio en la votación y fue elegido director de la organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la alimentación (FAO). Uno de los primeros grandes retos que ha tenido que afrontar es tratar de solucionar el problema de hambruna que afecta a más de 10 milllones de personas - algunos hablán de 12 millones - sobre todo, mujeres y niños.

En el caso de Somalia, Graziano asegura que es necesario, primeramente, que "la Comunidad Internacional apruebe esa transferencia masiva de recursos". Va a haber una reunión en Roma presidida por la FAO el próximo día 25 de julio - bajo la presidencia francesa del G20 - para hablar de esos recursos que son necesarios. Pero Graziano pone especial hincapié en la segunda parte de la ayuda: "A partir de septiembre se esperan lluvias en la región. Hay que cuidar que lleguen semillas y maquinaria para entonces para que esos agricultores puedan salir de la situación de emergencia y puedan rehacer sus vidas. Hay que darles la caña de pescar".

No basta con una solución parcial. La apuesta del director de la FAO es asegurar cosechas para prevenir hambrunas como la de Somalia: "Las sequías van a volver. Hay tecnología muy sencilla, como con la que cuentan ustedes en Andalucía, los aljibes. Se trata de sistemas de agua muy baratos de hacer y muy accesibles". Por eso, según Graziano, hay que construir aljibes que recojan el agua de lluvia para tenerlos listo antes de septiembre y "no depender más de la ayuda humanitaria de emergencia".

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La situación comienza a afectar a Sudán del Sur y Etiopía. "A los hambrientos no les puedo pedir que esperen. En septiembre tenemos que revertir esa situación", por eso Graziano vuelve a insistir en que esa infraestructura ha de hacerse, como tarde, en agosto porque en septiembre va a llover.

Por si fuera poco, a todos los problemas alimenticios de Somalia, se suma el elevado precio de algunos alimentos: "Cuando hay escasez, los mercados los acaparan los intermediarios y los precios se disparan". Y es que, en la región, "los precios eran ya elevados y, aun así, se han duplicado en el último mes".

Momento para la autocrítica

Graziano reconoce que "la capacidad de reacción efectiva de la Comunidad Internacional es muy lenta". Sabe que esa es la gran crítica que se hace sobre el sistema y es que "siempre esperamos a que se esté en la peor situación para hacer algo". No le falta razón, en el caso concreto de la hambruna en Somalia se lleva alertando desde hace dos años. "Tenemos que hacer mecanismos más efectivos", apunta.

El director de la FAO termina haciendo un llamamiento: "Comer es una preocupación de todos. Hoy día comer es un gran problema".