Las ventas españolas de armamento a países árabes se dispararon con las revueltas

En 2011, las exportaciones españolas de material de defensa ascendieron a 2.431 millones de euros lo que supone un aumento del 115% con respecto a lo exportado en el año 2010.

A pesar de que los países europeos suspendieron temporalmente (entre febrero y mayo de 2011) las ventas de armas a los países de Oriente Próximo y del Norte de África en los que se estuviesen produciendo protestas, lo cierto es que La Primavera Árabe fue muy rentable para el sector armamentístico español . Incluso con esos meses de impasse, los datos de ventas no podían ser mejores. Así se pone de manifiesto en el último informe sobre las exportaciones españolas de material de defensa correspondiente al año 2011 elaborado por el Ministerio de Economía.

El pasado año, las ventas de armamento español a los países árabes ascecendieron a 98 millones de euros lo que supone triplicar las ventas registradas en 2010, 29 millones.

Según este documento, en 2011, España vendió a Egipto tres aviones de transporte, motores y repuestos de vehículos no blindados además de una pequeña partida de pistolas por valor de 69,8 millones de euros (28 veces más de lo vendido el año anterior).

A Arabia Saudí se exportaron 14 millones de euros en repuestos para aeronaves de transporte y proyectiles iluminantes (más del doble de lo exportado en 2010). Bahrein compró munición para aeronaves a España por valor de 6,3 millones de euros, mientras que en 2010 había comprado, también munición, pero en mucha menor cantidad: 41.000 euros. Aumentaron también las ventas a Jordania que, en concepto de repuestos de aeronaves, pasaron de los 1,6 millones de euros en 2010 a 2,5 millones de euros en 2011. Tambien crecieron, aunque ligeramente, las exportaciones a Omán que ascendieron a 3,3 millones.

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762 millones en contratos autorizados con Emiratos Árabes Unidos

Aunque en 2011 sólo se registró una pequeña venta a Emiratos Árabes Unidos de 67.000 euros en concepto de bombas de aviación y subfusiles, este destino cobra especial relevancia ya que las ventas autorizadas el pasado año a este país (es decir, con el visto bueno del Gobierno aunque todavía no ejecutadas) ascienden a 762 millones de euros.

En cuanto al resto de "exportaciones arábes", en 2011 sólo se resintieron significativamente las ventas a Libia, que en 2010 ascendieron a 11 millones de euros y que el pasado año se redujeron a cero (cancelando el Gobierno los contratos vigentes y los envíos pendientes) coincidiendo con las revueltas.

Venezuela principal cliente. Pakistán se abre un hueco

En total, las ventas españolas de armamento en 2011 ascendieron a 2.431 millones de euros lo que supone un aumento del 115% con respecto a lo exportado en el año 2010.

Como en años anteriores, Venezuela sigue siendo el principal cliente español con 567,4 millones de euros correspondientes a tres patrulleros oceánicos, un buque de vigilancia del litoral y munición para piezas de tiro instaladas en buques. Le sigue Australia con 424,5 millones de euros en concepto de tres aviones de reabastecimiento en vuelo y Noruega que compró una fragata por 362,9 millones de euros.

A gran distancia, pero con un notable incremento (30 veces más que lo exportado en 2010) aparece Pakistán con 13 millones de euros en simuladores de vuelo, sistema de radar, reparación y modernización de motores de aeronaves y repuestos de aeronaves.

Destaca también la venta de un avión de transporte a Ghana por 27 millones de euros. Este país africano fue también el principal comprador de armas de caza y de uso deportivo con un gasto de 7,5 millones de euros.

En el capitulo de material antidisturbios, Perú (600.000 euros en gases lacrimógenos) y Venezuela (145.000 en aerosoles de autodefensa) fueron los principales clientes españoles.

China supera a Irán como cliente de material dual

Las ventas de material de doble uso (con fines civiles pero con posibilidad de uso militar) también experimentaron un leve incremento en 2011, de poco más del 2%. Ascendiendo a 99,4 millones de euros. Debido al endurecimiento de las sanciones internacionales, por primera vez en los últimos años el principal destino no fue Irán, que ahora ocupa la segunda posición por detrás de China.