El Consejo de Derechos Humanos aprueba una investigación de la matanza de Hula

El Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas ha aprobado por mayoría una resolución en la que insta al Consejo de Seguridad a denunciar la situación de violencia en Siria a la Corte Penal Internacional, al entender que se están cometiendo crímenes contra la humanidad.

La resolución pide que se lleve a cabo una investigación "internacional, transparente e independiente de las violaciones de las leyes internacionales" con el fin de que los responsables de las violaciones, sistemáticas y flagrantes de derechos humanos, sean llevados ante la justicia. Unos crímenes, dice el documento, que podrían constituir crímenes contra la humanidad. El texto condena además "el escandaloso uso de la fuerza contra la población civil, que constituye una violación el derecho internacional" y pide al gobierno de Bachar al Asad que "detenga la violencia en todas sus formas, incluido el cese del empleo de armamento pesado en poblaciones". La resolución pide además a Damasco que respete y proteja los derechos fundamentales de los ciudadanos sirios y que permita inmediatamente la entrada a la comisión internacional respaldada por el Consejo de Derechos Humanos, la entrada y libertad de movimiento en el país para que, en la medida de lo posible, lleven a cabo una investigación en la que "identifiquen públicamente a los responsables de las atrocidades y preservar las pruebas de crímenes que se puedan presentar en futuros procesos judiciales". El texto hace referencia además a la necesidad de que cese la violencia de forma inmediata "en todas sus formas y por todas sus partes" e invita al enviado especial de la ONU y la Liga Árabe, Kofi Annan, a informar al Consejo del estado de la mediación en la siguiente sesión.

Rusia ha considerado "desproporcionado" acusar al gobierno de las violaciones de derechos humanos y no hacer lo mismo con las acciones de los "terroristas que han atentado en ciudades sirias y asesinado a centenares de personas". El embajador chino ante la ONU en Ginebra ha apoyado la investigación de la masacre de Hula y respaldado el plan de Annan pero ha insistido en que su aplicación debe recaer "en todas las partes", en referencia a los grupos armados de la oposición y se ha mostrado en contra de una intervención armada extranjera. El embajador sirio, Faisal Al-Hamwi, ha insistido en que la postura de la mayoría de la comunidad internacional tiene una raíz "sionista". Ha aseverado que el respaldo de esta resolución es un apoyo "al terrorismo dentro de Siria y al envío de mercenarios que han matado a civiles inocentes. Damasco ha insistido en que los países que han votado a favor de la resolución quieren "interferir en asuntos internos en vez de proteger al pueblo sirio".