El embajador permanente de Siria ante la ONU, Bashar Jaafari, ha deplorado este domingo el «tsunami de mentiras» proferido por sus homólogos en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, a los que ha acusado de «estar mintiendo» sobre lo acontecido el pasado viernes en la localidad siria de Hula, en el oeste del país, donde, según la ONU, 108 personas fallecieron y 300 resultaron heridas. En la rueda de prensa posterior a la reunión urgente en el Consejo de Seguridad, Jaafari ha recriminado el «tsunami de mentiras» que han pronunciado los embajadores de Francia, Alemania y Reino Unido ante Naciones Unidas minutos antes de su comparecencia. «Están tratando de engañaros, diciendo que el nivel de sus acusaciones contra mi Gobierno está basado en lo que ellos califican de pruebas. Están equivocados y os están mintiendo», ha enfatizado Jaafari. No obstante, casi al término de la rueda de prensa, Jaafari ha apuntado que «nada indica que el Consejo de Seguridad culpe al Gobierno sirio» del bombardeo sobre Hula. «Estamos hablando de un teatro de operaciones que ha hostigado numerosas pequeñas poblaciones en esta zona», ha esgrimido. «No estamos hablando de una ofensiva militar que tuvo lugar y concluyó en cuestión de media hora. Es una operación militar completamente desarrollada y planificada con antelación con múltiples propósitos», ha sentenciado Jaafari. El embajador sirio ante Naciones Unidas ha descrito la masacre de Hula como «un crimen atroz, horroroso, injustificado e injustificable» y ha ensalzado que Damasco lo ha condenado «en sus términos más enérgicos posibles». «Es un crimen terrorista», ha dicho, «no podemos describirlo con unos términos distintos». «Ningún gobierno masacraría a sus propios ciudadanos en pos de una victoria política sobre sus oponentes», ha alegado Jaafari, quien ha sugerido que los posibles responsables son «otros elementos del escenario». Jaafari ha insistido en que fueron «grupos armados terroristas» los que perpetraron la matanza en Hula. El régimen de Bashar al Assad ha recurrido asiduamente a este término para identificar al brazo armado de los rebeldes, el Ejército Libre Sirio (ELS). En este sentido, ha instado al Consejo de Seguridad a que se reúna también para «identificar», «avisar» y «llevar ante la Justicia» a aquellos que «están armando a grupos terroristas en Siria, que les están protegiendo, instigando e incitándoles a la violencia». «Quien haya cometido estos crímenes, será llevado ante la Justicia siria», ha asegurado.