El fuego de Ourense alcanza ya las 1.200 hectáreas quemadas
El incendios se ha adentrado en el municipio de Rubiá, obligando a desalojar a los vecinos de las parroquias de Veiga de Cascallá y O Barrio de Cascallá
Galicia vive el primer gran incendio forestal del año. Más de 800 hectáreas han quedado ya calcinadas en O Barco de Valdeorras, en Orense. En la noche de este viernes, numerosos vecinos fueron desalojados y siete personas tuvieron que ser atendidas por inhalación de humo. Los afectados han sido dados de alta este sábado. El incendio, que se originó ayer sobre la una de la tarde, está siendo controlado por efectivos de la Unidad Militar de Emergencias. Los miembros de la UME están teniendo este sábado complicaciones debido a las altas temperaturas y el fuerte viento. Como medida preventiva se mantiene el nivel 1 de alerta. El gobierno gallego lo ha clasificado como "gran incendio forestal" debido a la enorme superficie de masa quemada / ATLAS
Las llamas ya ha quemado unas 1.200 hectáreas del municipio orensano de O Barco de Valdeorras, por lo que la Xunta lo ha calificado como 'Gran Incendio Forestal' dada la gran extensión arrasada en un incendio que continúa activo.
La Consejería de Medio Rural de la Xunta de Galicia ha elevado a 1.200 hectáreas la superficie afectada por el incendio que se originó este viernes en O Barco de Valdeorras (Ourense) y que se ha adentrado este sábado en el municipio próximo de Rubiá, obligando a desalojar a los vecinos de las parroquias de Veiga de Cascallá y O Barrio de Cascallá.
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El departamento autonómico de Medio Rural ha explicado en un comunicado que la intensidad y los cambios de dirección del viento están dificultando las tareas de control y de extinción, lo que provoca que se tenga que "cambiar constantemente de estrategia" para controlar su perímetro.
Su titular, Rosa Quintana, ha cifrado la superficie afectada en 1.200 hectáreas, pero ha insistido en que son datos provisionales porque "el fuego sigue avanzando". Del mismo modo, ha explicado que la "prioridad" en estos momentos es dar el fuego por controlado para poder después georeferenciar la superficie afectada.
También ha explicado que el desalojo de los vecinos de Veiga y Barrio se ha efectuado como medida preventiva ante la intensidad del fuego. A su vez, el alcalde de Rubiá, Elías Rodríguez, ha indicado que algunos vecinos permanecen en la zona preocupados por sus viviendas, pero también se ha habilitado el pabellón municipal para su atención.