Garoña no es viable económicamente

La compañía propietaria de la central nuclear más antigua de nuestro país ha pedido al Ministerio de Industria una ampliación del plazo oficial para pedir la prolongación de la vida de Garoña. El plazo terminó ayer y Nuclenor renunció a pedir una prórroga por motivos económicos. Ahora la decisión depende del Ministerio de Industria

El Ministerio de Industria todavía no ha informado si prolongará, o no, el plazo para solicitar la renovación del permiso a la central nuclear de Garoña, la más antigua de nuestro país.

Este plazo terminó ayer a las 12 de la noche y NUCLENOR, la compañía propietaria de esta instalación, no pidió la prolongación de la vida de este reactor por un motivo básicamente económico, ya que asegura que desconoce cuánto dinero le costará las nuevas condiciones que podrían establecerse para aprobar la renovación de su licencia.

En concreto, la empresa propietaria de Garoña basa su decisión en que, hasta el momento, desconoce cómo le afectaría la nueva tasa para la generación nuclear en el marco de la reforma del sistema energético que ahora prepara el gobierno del Partido Popular o los nuevos impuestos que podría también imponer la Junta de Castilla y León.

NUCLENOR, una compañía formada por las eléctricas Endesa e Iberdrola, envió ayer un escrito al Ministerio de Industria en el que pide una ampliación del plazo oficial para pedir la renovación y en su misiva también adelanta que pedirán la prórroga si el gobierno central despeja antes "las incógnitas en torno a la viabilidad económica de la planta".

Industria todavía no se ha pronunciado a este respecto, pero los grupos ecologistas ya están celebrando el cierre del reactor más antiguo de nuestro país y cuyo diseño es muy similar a los de la central japonesa de Yukushima.

Greenpeace anuncia que Garoña será cerrada el año que viene, porque el plazo otorgado por el Ministro de Industria ha terminado sin que la empresa propietaria solicite la renovación de su licencia de explotación, que termina en el año 2013.

Por su parte, NUCLENOR recuerda en un comunicado que ha invertido ya 120 millones de euros en Garoña, pero que, por ahora, no puede pedir la renovación de su permiso de explotación porque no tiene garantizada la viabilidad económica de esta planta durante los próximos años.