Libia pide perdón a Estados Unidos por la muerte de su embajador
El Gobierno libio acusa del ataque al consulado en Bengasi a grupos ligados al fallecido dictador Gadafi, pero en los últimos meses la ciudad cuna de la revolución ha sufrido repetidos ataques de salafistas
El Gobierno libio ha prometido justicia tras el asesinato del embajador estadounidense en Libia, Chris Stevens, la pasada madrugada, durante un asalto armado al consulado en Bengasi. Estados Unidos ha enviado medio centenar de marines para proteger a su personal diplomático tras este ataque, que acabó también con la vida de otros tres funcionarios norteamericanos.
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La autoría del ataque no está aclarada. Se ha relacionado con la ira provocada entre los musulmanes por un vídeo que insulta a Mahoma y al islam, y cuya autoría se atribuyó en un principio a israelíes y judíos residentes en Estados Unidos. Después se ha sabido que son cristianos radicales, también afincados en Estados Unidos, los promotores. Ese vídeo provocó anoche protestas violentas ante la embajada norteamericana en El Cairo (Egipto). Los manifestantes egipcios saltaron el muro que protege la legación diplomática y arriaron y quemaron la bandera estadounidense.
En el caso de Libia, los incidentes permanecen sumidos en la confusión. Ningún grupo ha reivindicado el ataque, llevado a cabo con armas automáticas y lanzagranadas. El primer ministro del gobierno interino ha responsabilizado a elementos del antiguo régimen, seguidores de Gadafi que buscan desestabilizar el proceso de transición. Pero otras fuentes apuntan a la autoría de alguno de los grupos salafistas que están operando en los últimos meses en Bengasi y sus alrededores. Estos grupos han llevado a cabo ataques contra la Cruz Roja, contra un convoy en el que viajaba el embajador británico o contra la sede de Naciones Unidas. También se han registrado ataques de estos grupos contra mezquitas y tumbas sufíes, ya que consideran a esta rama moderada del islam como impía.
El ataque podría ser obra de estos grupos islamistas ultraconservadores. La CNN asegura que se trató de un ataque planeado y que los asaltantes usaron las protestas contra el vídeo sobre Mahoma como maniobra de distracción. Los habitantes de Bengasi han protagonizado varias manifestaciones en protesta por la actuación de estos grupos armados radicales. Hoy y mañana vuelven a salir a las calles en contra del ataque al consulado estadounidense.