Sindicatos y organizaciones sociales salen a la calle contra los Presupuestos

Hace una semana que se presentaron los Presupuestos Generales del Estado (PGE), pero las reacciones no se han hecho esperar. Tras las voces políticas de oposición hacia unas cuentas calificadas como erróneas y de recortes masivos, este domingo han sido los sindicatos y las organizaciones sociales las que han salido a la calle.

La llamada Cumbre Social, formada por unas 150 entidades sociales y acompañados por representantes de grupos políticos como PSOE o Izquierda Unida; ha marchado de nuevo este domingo 7 de octubre en 57 manifestaciones programadas. El objetivo: mostrar su rechazo hacia unos Presupuesto que tachan de "antisociales" y hacia los nuevos recortes que, a su parecer, "ahondan en la recesión económica".

En el centro de Madrid han proliferado los gritos que pedían la dimisión del Gobierno, al que acusan de criminalizar cualquier protesta y al que piden una consulta sobre los recortes. Sobre las 13:30 horas, la cabecera de la marcha ha llegado a su final, donde, según los organizadores, se han reunido algo más de 70.000 personas.

Bajo el lema ''Quieren arruinar el país. Hay que impedirlo'', los convocantes querían que las calles de toda España se convirtiesen en un clamor contra los últimos ajustes del Gobierno. Denuncian que "van a hundir aún más en la pobreza" a la población, por lo que han exigido una salida de la crisis que garantice soluciones para los problemas del momentos como la reactivación económica, la generación de empleo, la recuperación de la protección social y del "mermado" Estado del Bienestar.

Durante la protesta se han coreado proclamas contra el sistema financiero y se han podido leer lemas pidiendo "recortes para los políticos". También ha habido muchos colectivos en defensa de los servicios públicos, como los miembros de la "marea verde" por la educación pública.

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También han pedido que unos PGE "tan dañinos" como los presentados por el Gobierno de Mariano Rajoy sean rechazados en el debate parlamentario, obligando al Gobierno a presentar otros al servicio de la ciudadanía y no de la banca. De la misma forma, continúan con la petición de un referéndum social en el que se le pregunte al pueblo sobre los recortes y medidas que el PP no llevaba en su programa electoral. En el caso de no realizarse dicha consulta, los sindicatos avisan, se producirá la segunda huelga general desde que Rajoy ocupó la Moncloa.

Tras celebrar su tercer encuentro, la Cumbre Social confesó que no descarta ir a la huelga general para protestar contra las políticas del Gobierno. De momento, cada organización dispondrá de un plazo de tiempo para valorar esta posibilidad, con la idea de que el paro general, de convocarse, tenga un "profundo carácter social" y se celebre durante la tramitación parlamentaria de los Presupuestos.

Los secretarios generales de CCOO y UGT, Ignacio Fernández Toxo y Cándido Méndez respectivamente, han señalado este domingo que los Presupuestos de 2013 provocarán "más recesión y más paro", y han recalcado que la convocatoria de huelga general depende del Ejecutivo.

El líder de CCOO ha indicado que la ciudadanía "además de estar cabreada debe estar perpleja", puesto que la presentación de los presupuestos generales coincidió en el tiempo con la del informe de la consultora Oliver Wyman sobre las necesidades de capital del sector bancario español.

Toxo ha recordado que las centrales españolas propondrán al Comité Ejecutivo de la Confederación Europea de Sindicatos la convocatoria de una "jornada de acción europea" en la reunión que tendrá lugar el próximo 16 de octubre.

Para la Cumbre Social, los Presupuestos Generales solo contemplan "recortes a la inversión, sacrifican los estímulos a la actividad económica y a la creación de empleo y renuncian a una política fiscal que, empezando por perseguir decididamente el fraude, permitiese incrementar los ingresos del Estado y evitar así una nueva reducción de los gastos sociales".

El acto central de las protestas se localiza en Madrid, con una manifestación entre la plaza de Legazpi y la estación de Atocha, con la presencia de Toxo y Méndez, así como su homólogo en USO, Julio Salazar o el secretario de CSI-F, Miguel Borra.

La actriz Nuria Pérez, de la Unión de Actores, ha sido la encargada de leer el manifiesto final de la Cumbre Social, en el que se condena la "deriva autoritaria" del Ejecutivo por tratar de reducir el impacto de las movilizaciones que se convocan contra sus decisiones.

Según el texto, "la ciudadanía está reaccionando y no hay una mayoría silenciosa con la que se pueda jugar según convenga".