Ruiz-Mateos no recibirá ninguna compensación del Estado por Galerías Preciados
El Supremo zanja la polémica de Ruiz-Mateos con Galerías Preciados treinta años después de la expropiación
Fotografía de archivo del empresario José María Ruiz-Mateos(EFE/Manuel H. de León)
El Tribunal Supremo ha rechazado definitivamente el intento del empresario Ruiz-Mateos para que el Estado le compense por Galerías Preciados treinta años después de la expropiación. El Supremo niega el aumento de valor de sus acciones y cierra la posibilidad de que el Estado deba devolverle dinero por Galerías Preciados.
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El Tribunal Supremo ha confirmado, treinta años después, que el Estado no deberá compensar al grupo Rumasa por la expropiación de Galerías Preciados. El grupo empresarial de la familia Ruiz-Mateos era principal accionista de las Galerías cuando fue expropiado por el Estado. El Alto Tribunal niega que sus acciones deban subir de valor, ya que fueron declaradas por valor cero como consecuencia del saldo negativo de 1.569 millones de euros de Rumasa, y cierra la puerta a una compensación para el grupo empresarial. En la actualidad, la familia Ruiz-Mateos sigue inmersa en procesos judiciales por supuestos fraudes en la gestión de Nueva Rumasa.
El grupo Rumasa, de la familia Ruiz-Mateos, fue expropiado en febrero de 1983 cuando el Gobierno detectó un agujero de 1.569 millones de euros. Dentro del baile judicial, los expropietarios del grupo solicitaron una compensación por las Galerías Preciados, una compensación que fue negada por el Tribunal Superior de Justicia de Madrid. Las acciones que Rumasa tenía en Galerías Preciados, una participación del 78.62%, fueron declaradas de valor cero después de que el balance del saldo neto fuera de más de 1.500 millones de euros negativos.
Es una decisión que ahora confirma la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Supremo, en una sentencia de la que ha sido ponente el magistrado Antonio Fonseca-Herrero. En su escrito, el alto tribunal indica que la denegación de una retasación de las acciones fue correcta, que nunca existió una obligación de pago por parte del Estado y que por tanto no cabe hablar de ningún incumplimiento. Señala igualmente que esta retasación es un hecho que ya ha sido juzgado en los años 2000 y 2004 por este mismo Tribunal Supremo, dos ocasiones en las que las acciones del grupo en Galerías Preciados también fueron tasadas por valor nulo.
En la actualidad, el grupo Nueva Rumasa, también propiedad de la familia Ruiz-Mateos, se encuentra inmerso en procesos judiciales tras haber sido declarado en suspensión de pagos. El juez Pablo Ruz de la Audiencia Nacional, durante las investigaciones a Nueva Rumasa, dedujo que la familia Ruiz-Mateos utilizaba el dinero del grupo empresarial para inyectar capital en sus propias empresas y mantener así "su alto nivel de vida".
