La troika da más tiempo a Portugal, que se hunde en la recesión y el desempleo

Según confirmó este viernes el ministro de Finanzas portugués, Vítor Gaspar, Lisboa cerró 2012 con un déficit excesivo del 6,6%, por encima de la meta de 5% pactada en septiembre pasado con los organismos internacionales. El ministro lo ha justificado diciendo que el desvío se ha debido al hecho de que Eurostat no permitió que los lucros de la privatización de ANA, la empresa que gestiona los aeropuertos, fuesen destinados a reducir el déficit, que habría sido del 4,9% con esta receta extraordinaria.

Ahora, y debido al deterioro de la economía a nivel europeo, la troika ha concedido una nueva prórroga de un año para que Portugal consolide sus cuentas públicas. En 2013, el déficit luso tendrá que reducirse hasta el 5,5% el PIB; en 2014, al 4% y en 2015 al 2,5%. En la rueda de prensa en la que anunció ésta y otras conclusiones de la séptima evaluación de la troika, Vítor Gaspar afirmó que la consolidación de las cuentas públicas en Portugal "se realizará con el esfuerzo de una generación".

Y mientras el Gobierno de coalición conservadora de Lisboa sigue empeñado en ser "un buen alumno" ante la troika, a nivel interno, los indicadores económicos son cada vez peores. Para 2013 se espera una recesión del 2,3%, más del doble del 1% de las previsiones anteriores. El desempleo tampoco se salva de la espiral recesiva en la que ha entrado la economía lusa. Para 2013, se prevé una subida por encima del 18%, que podrá alcanzar incluso el pico del 19% a finales de año. Hay que recordar que en abril de 2011, cuando Protugal solciitó la ayuda externa, el paro se situaba en el 12,6%.

"El desempleo, sobre todo, el juvenil, ha excedido considerablemente las previsiones y es un flagelo individual, social y familiar", dijo el ministro luso. Sin embargo, el gobierno ha aceptado las exigencias de la troika y ha decidido reducir las indemnizaciones por despido, que pasarán a ser de 12 días por año trabajado para los contratos indefinidos. Para los contratos temporales, en despidos hasta los tres años, las indemnizaciones serán de 18 días por año trabajado y de 12 días a partir del cuarto año de contrato.

En esta séptima evaluación del programa de ayuda externa el tema pendiente sigue siendo la reforma del Estado, en la que la troika exige a Portugal cortes de cuatro mil millones de euros permanentes en el gasto público, para cuya concretización, el gobierno de Pedro Passos Coelho ha negociado con la troika un año más de plazo, hasta 2015. Durante las próximas semanas está previsto que el ejecutivo presente las primeras medidas de contención. Para este año se prevé una reducción de 500 millones de euros que el gobierno calcula conseguir a través de rescisiones amigables con funcionarios y cortes de costes de los diferentes ministerios.

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"El esfuerzo a partir de 2014 se centrará en la reducción del gasto público y con ese motivo se ha lanzado el debate sobre la reforma del Estado", dijo el ministro de Finanzas en la rueda de prensa, añadiendo que "es imperativo adecuar las exigencias de los portugueses con lo que están dispuestos a pagar en impuestos, tasas y contribuciones". Según Gaspar, "la reducción de la carga fiscal no será posible sin la correspondiente reducción del gasto público".