Carlos Saura se lanza a la dirección teatral con 'El gran teatro del mundo'

¿Qué más le queda por hacer a Carlos Saura? A sus 81 años puede presumir de ser uno de los pocos humanistas que quedan este país. Lo ha hecho casi todo. Fotógrafo, director de cine, escritor, director de ópera... Solo le quedaba un palo: la dirección teatral. Palo que se atreve a tocar ahora nada más y nada menos que con 'El gran teatro del mundo' de Pedro Calderón de la Barca. Eso sí, a su manera. 'El gran teatro del mundo' de Saura es una versión "popular, libre e irrespetuosa" que se estrena en Madrid el próximo 4 de abril.

Ya lo advierte un actor nada más comenzar el ensayo: "Antes de empezar sepan ustedes que la representación es en ocasiones poco respetuosa con el texto original. Esperamos que don Pedro Calderón de la Barba perdone nuestro atrevimiento y nuestras deficiencias".

Si Carlos Saura ha elegido 'El gran teatro del mundo' para su debut teatral es porque siempre le ha fascinado esta "magnífica obra" a pesar de que, como dice, es "muy difícil de entender". De hecho, hace un tiempo fue a ver otra versión y no se enteró de nada. Ahora se ha puesto el reto de hacérsela llegar al público. Aunque, todo hay que decirlo, ya tuvo un pequeño acercamiento en su película 'Elisa, vida mía' en la que dos niñas del orfanato de Segovia se ponen a interpretar algún fragmento.

La obra de Calderón ya de por sí no es fácil, describe la vida como si fuese un gran teatro y transmite la idea de que solo a través de la muerte se llega a la verdadera vida. Pero Saura saca pecho y se atreve a rizar el rizo poniendo al propio Calderón dirigiendo su obra. "Una de las cosas mágicas que tiene la obra de Calderón es ese desdoblamiento que existe entre una persona normal y lo que tiene que representar", confiesa el ganador de un Goya por '¡Ay, Carmela!'. José Luis García Pérez lidera un reparto lleno de rostros conocidos como el de Fele Martínez, Adriana Ugarte, Ruth Gabriel y Manuel Morón.

Es difícil que Saura se olvide del cine, por eso no ha podido evitar gritar "¡Acción!" cuando ha dado comienzo el ensayo al que estaba invitada la prensa: "Les he preguntado cómo se dice en teatro que se empiece y me han dicho que no se dice". Confiesa que le gusta "el teatro dentro del cine" y que cuando baja al escenario para darles órdenes a los actores le entran las ganas de coger la cámara: "Tengo un vicio visual". Como bien dice, "el teatro es un plano general que dura una hora y cuarto o una hora y veinte minutos"