Rajoy insiste, junto a Aznar, en la reactivación económica: "España va mejor"

Rajoy ha clausurado este domingo, en la localidad madrileña de Guadarrama, el Campus FAES junto con el presidente de esa Fundación, José María Aznar, un encuentro que se producirá un mes y medio después de las críticas que éste profirió contra la política económica del actual Ejecutivo.

El presidente del Gobierno acudió a clausurar el Campus FAES con un discurso centrado en la economía. Mariano Rajoy dijo que "España va mejor" y defendió, frente a Aznar, que estamos en "el rumbo correcto": "Nuestra economía ha dado la vuelta al reloj de arena, estamos en la cuenta atrás de la recuperación y en el arranque de un cambio de tendencia que nos conducirá, no sin dificultades, pero con mucha perseverancia y mucho empeño, a la recuperación del crecimiento y creación de empleo".

Rajoy ha dicho que él no se muestra ni optimista, ni pesimista, sino "realista". Y ha asegurado que "hoy estamos mucho mejor que el mes de julio del pasado año, pero mucho peor que el mes de julio de 2015". Además ha presumido de sus reformas y ha anunciado que algunas de las que vendrán, como la de las pensiones, serán muy duras: "Es evidente que si queremos mantener, mejorar y garantizar el sistema de pensiones, tenemos que tomar decisiones que van a tener efecto en el futuro. Es también una reforma compleja, que no es fácil, pero la responsabilidad de un Gobierno exige que se haga".

El expresidente del Gobierno había defendido previamente ante Rajoy la reforma fiscal que ha planteado la Fundación FAES y que considera que puede ayudar a que haya una recuperación más rápida de la economía española. Aznar ha hecho una defensa de esa reforma en su intervención en el acto de clausura del campus de verano FAES y antes de dar la palabra a Rajoy, con quien se había reunido unos minutos previamente.

El expresidente ha señalado que en el campus FAES se ha hecho lo que se espera de esta fundación, hacer propuestas constructivas para España que puedan ser "analizadas, discutidas, y, en algunos casos, incluso aprovechadas".

Y a su vez Rajoy le ha respondido, sacando pecho por su gestión, justificando sus medidas más difíciles para evitar el rescate y pidiéndole que no le juzgue antes de que acabe su mandato: "Quedan todavía dos años y medio para el final de la legislatura. Los balances se hacen cuando hay que hacerlos. No al principio. Porque eso no es justo y eso no conduce a nada"

Primer encuentro público desde 2012

Se trata de la primera vez que Rajoy y Aznar se vean las caras después de que el pasado 21 de mayo el expresidente del Gobierno criticara en una entrevista en Antena 3 la política fiscal del actual Ejecutivo del PP, abogara por bajar impuestos y finalmente no descartara volver a la política.

"El proceso de castigo a las clases medias está siendo muy fuerte", lamentó Aznar. Los populares no quisieron responder a las palabras de Aznar y se limitaron a guardar silencio. Rajoy desde Bruselas señalaba que no comentaba manifestaciones de expresidentes y aseguraba que mantendría el rumbo de su política económica.

Días después, el 27 de mayo, Aznar afirmó no estar "contra nadie" sino "con todos los españoles" en referencia, sin citarla, a la polémica creada por sus críticas al Gobierno de Mariano Rajoy, en un acto en el Congreso al que no asistieron ni ministros ni barones autonómicos ni la cúpula del PP.

Esa distancia se mantuvo sólo hasta el 10 de junio, cuando la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría; el ministro de Industria, José Manuel Soria, y Carlos Floriano, uno de los tres vicesecretarios generales del PP, acudieron a la conferencia que Aznar ofreció en el Club Siglo XXI, con lo que se dio por finalizada la polémica.

Rajoy y Aznar no se ven en un acto público desde el 26 de noviembre de 2012 durante la presentación del primer tomo del libro de memorias del presidente de FAES. Sí se han visto en privado en el Palacio de la Moncloa en una reunión que trascendió hace unas pocas semanas, que también mantuvo Rajoy con Felipe González porque, según explicó, los expresidentes "por sus conocimientos y su historia en este país" pueden aportar "cosas útiles para la mejor gobernación de España".