"Hay que comprar lo que se come y comer lo que se compra"

Está comprobado que desde que llegó la crisis la gente come un poco menos. Para que la bajada de poder adquisitivo no afecte a nuestra alimentación, la experta en nutrición y dietética Pilar Cervera, aconseja aprovechar los recursos al máximo y no despilfarrar.

Como si de un chicle se tratara, la nutricionista Pilar Cervera recomienda estirar todo lo posible los alimentos para que, a pesar de la crisis, los ciudadanos sigan respetando los buenos hábitos. Y todo teniendo en cuenta que la comida influye de forma importante en nuestra salud y bienestar "la comida es un placer, tan triste es el que vive para comer como el que come para vivir", apunta la experta.

Los datos son muy gráficos. Según la FAO, más de mil millones de toneladas de comida se desechan cada año, un tercio de la producción mundial. Por este motivo y por el bien de nuestra cartera, la dietista insiste en que hay que sacar el máximo partido a los alimentos: "Si sobra aprovechemos para hacer sopas, guisos, croquetas, bocadillos; preparar fiambreras para el colegio o el trabajo, congelar...".

El pan ocupa espacio en los manteles de casi todas las mesas y, aunque parezca insignificante en cuanto al precio, la dietista recomienda "comprar el pan que se vaya a comer y congelar el que sobra". Además pide no marginar a la corteza, que supone el 10% del pan "cuando tiremos un trozo de corteza pensemos que estamos tirando la energía y la tierra cultivable que se usó para producir este alimento", añade.

La nutricionista pone la voz de alarma en el consumo masivo de ciertas comidas como las patatas, que dan sensación de saciedad (por su alto contenido en almidón y agua) y son baratas, "es uno más dentro del abanico" advierte refiriéndose a los tubérculos.

A la hora de ir al supermercado tener las ideas claras también es importante. Y el lema es sencillo: "Comprar lo que se come y comer lo que se compra". Para evitar tentaciones la experta aconseja planificar el menú semanal, hacer la lista de la compra antes de salir de casa y ceñirse a ella, tener cuidado con ofertas, comprar alimentos de temporada y a ser posible, a granel.

No debemos olvidar que las grandes superficies también tienen responsabilidad para que no se desperdicie la comida: "en los supermercados ves que colocan lo nuevo delante de todo. Hay que rotar bien los alimentos".

En definitiva, para ahorrar y comer bien lo importante es exprimir nuestro frigorífico y hacer de la necesidad virtud: "Sólo en los momentos de crisis la imaginación es más importante que el conocimiento. Imaginación al poder en pro de la sostenibilidad. Esperemos que la crisis dure poco pero que nos ayuda a mejorar nuestros hábitos alimentarios", apostilla Pilar Cervera.

Esta profesora de la Universidad de Barcelona (ya jubilada) ha participado en la Escuela de Nutrición 'Francisco Grande Covián' que organiza la Universidad Internacional Menéndez Pelayo en colaboración con el Instituto Danone.