Europa pide a Obama que deje de tratarlos como "coreanos del Norte"
Gilles de Kerchove, Coordinador Europeo contra el Terrorismo, ha explicado a la SER el resultado de las últimas reuniones con Estados Unidos
La Unión Europea prepara un listado de reivindicaciones con el objetivo de que el presidente Obama pueda estudiarlas antes de presentar su anunciada reforma para garantizar los derechos de los ciudadanos americanos.
Más información
La lista y la estrategia que ha de seguir Europa van a ser estudiadas en la reunión que los ministros de Justicia y de Interior celebren en Bruselas los próximos 5 y 6 de diciembre aunque el Coordinador Europeo contra el Terrorismo advierte de que el camino para el acuerdo "no será fácil" porque los Estados Unidos han abierto un debate sobre la necesidad de proteger a sus ciudadanos pero "nadie se ha planteado proteger a los no americanos y este es el gran problema al que nos enfrentamos", ha explicado a la Cadena SER Gilles de Kerchove.
Europa desea incluir en la reforma del presidente Obama un sistema de protección ampliado para los europeos que permita limitar la recogida de datos a "lo estrictamente necesario" y vinculado a la lucha contra el terrorismo. Pero restringir el concepto de "lo necesario para evitar que este sea un objetivo genérico" no está aún garantizado.
El problema europeo, dice Kerchove, es que "aunque somos aliados en la OTAN y tenemos tratados transatlánticos de varios tipos, vinculados sobre todo a la seguridad, en la práctica nos consideran como coreanos del norte", nos explica mientras pide perdón por la caricatura. Gilles de Kerchove confía en que el próximo Consejo de Ministros de Justicia y de Interior abra el debate con voluntad de convencer a Estados Unidos porque "la mejor manera de protegernos está en nuestra capacidad de influir en esta reforma que ha prometido Obama. Y para eso es importante estar presentes en el debate en Estados Unidos", señala.
Kerchove propone que Europa haga de lobby "en el Congreso, ante la Casa Blanca, intentando influir en sus grandes empresas y ante sus propios lobbies". Los Estados Unidos han dado explicaciones a la UE sobre los dos programas básicos a través de los que recopilan información, uno pensado para el seguimiento de las conversaciones telefónicas y de internet en Estados Unidos (215) y muy vinculado a la lucha contra el terrorismo, aunque el problema principal para los europeos está en el programa (702) que autoriza a los americanos a acceder al contenido total de las llamadas o de las comunicaciones vía internet en cualquier parte del mundo y con objetivos tan generales como prevenir si es necesario "un impacto macro financiero". Kerchove afirma que los responsables americanos han dado garantías que "ninguno de estos datos ha sido utilizado para obtener ventajas cordiales frente a las empresas europeas".