Podemos niega recibir financiación de Venezuela

Varios miembros e ideólogos de Podemos figuran o han figurado como parte del consejo ejecutivo de la fundación CEPS (Centro de Estudios Políticos y Sociales), que, según publica hoy el diario El País, recibió en 11 años (de 2002 a 2012) 3,7 millones de euros del Gobierno venezolano que presidía Hugo Chávez por distintas actividades. Luis Alegre, coordinador del equipo de trabajo de Podemos y miembro del consejo de CEPS hasta la creación del partido, descarta cualquier relación entre las cuentas de Podemos y las de la fundación.

Alegre no pone en cuestión los datos que publica El País, que se basan en el registro de fundaciones del Ministerio de Cultura, pero asegura que los pagos de Venezuela "y otros países de América Latina" a CEPS "no tienen nada que ver" con la financiación de Podemos. "El partido tiene unas cuentas enteramente transparentes, se ha financiado exclusivamente con donaciones de la gente de 19 euros de media. Y las cuentas serán auditadas por una empresa independiente antes de ser presentadas ante el Tribunal de Cuentas".

Podemos emitió a primera hora de la tarde un comunicado en respuesta a la noticia publicada por El País. En él, la formación asegura que en su web puede constatarse (en la relación completa de cuentas que Podemos publica desde su fundación) que "ni recibe ni ha recibido ni un solo euro de ningún Gobierno o fundación extranjero o nacional". La Ley de Protección de Datos impide que se publiquen los nombres de los donantes del partido, pero Luis Alegre mantiene que "no ha habido donaciones, ni a título individual ni institucional, de nadie del Gobierno de Venezuela".

Pablo Iglesias, Juan Carlos Monedero, Íñigo Errejón y el propio Luis Alegre, todos profesores en la Universidad Complutense de Madrid y padres ideológicos de Podemos, han sido (Errejón aún lo es) miembros del consejo ejecutivo de CEPS entre 2002 y 2012, los años en los que se centra la información de El País. A través de la fundación realizaron trabajos "académicos y de asesoría técnica" en diversos países de Latinoamérica. "Vincular esos trabajos con Podemos es manipulación", opina Luis Alegre. El coordinador del equipo de trabajo que llevará al partido a su congreso fundacional de octubre, profesor de la Facultad de Filosofía, afirma que pertenece a CEPS, "como a muchas otras asociaciones o grupos que no se mencionan en la noticia, entre ellas la Sociedad Española de Estudios Kantianos o la Asociación de Derechos Civiles del Ateneo".

En el marco de su trabajo para la fundación CEPS, Alegre coordinó y formó "con un salario modesto" a un equipo de economistas, otro de juristas y otro de profesionales de comunicación en Venezuela, "un trabajo del que estamos orgullosos", proclama. Alegre reconoce que la experiencia adquirida allí le ha servido para desarrollar su actividad en Podemos, pero no cree que el partido tenga como principal referencia ideológica el chavismo.

Únete al canal de WhatsApp de la SER

"Nosotros no nos sentimos próximos a ningún modelo extranjero, somos un movimiento estrictamente local que sería impensable sin el hecho insólito del 15-M, es la principal fuente de la que bebemos", aclara Alegre. La evidencia de un referente principal no elimina que para establecer su posición en ciertas materias, Podemos se fije en otros países: "Si tuviésemos que mirar algún modelo educativo, miraríamos a Finlandia. Igual que si tuviésemos que atender a procesos de reestructuración de la deuda, aprenderíamos de Ecuador, o de otros países de América Latina en reducción de niveles de pobreza [uno de los grandes logros del Gobierno venezolano]".

Podemos termina su carta de respuesta recordando que sus profesores no han sido los únicos miembros de formaciones políticas (aunque entonces aún no existía el partido) que han desempeñado asesorías en países de Latinoamérica: PSOE e Izquierda Unida son citados como ejemplo. En el último párrafo la formación se reafirma en sus tesis principal: la actividad como docentes o investigadores de los miembros de Podemos no convierte al partido en beneficiario económico de quien pagó a sus miembros.