Joseba Fiestras: "Echaremos de menos a Mediaset"

Como cada año desde 2009, en Vitoria, después de las fiestas viene el festival. O más concretamente el FesTVal. Con la T y la V bien grande. Porque durante una semana, esta ciudad vasca se convierte en el epicentro de la televisión en España. Medios especializados, ejecutivos de cadenas, actores, productores, presentadores... todos miran y se desplazan hasta Vitoria. Se enciende el pilotito rojo, se extiende la alfombra naranja y se da el pistoletazo a una nueva edición del festival de televisión más importante a nivel nacional. Este año, en su sexta edición -tendrá lugar entre el 1 y el 6 de septiembre- el FesTVal no contará con los estrenos de Mediaset, que ha atribuido a decisiones estratégicas la decisión de no presentar en dicho festival sus novedades para la próxima temporada.

Es el punto más feo en un evento en el que su director, Joseba Fiestras, refleja perfectamente el espíritu de entrega e ilusión que inunda cada año a todos los que participan en él. Nacido por iniciativa de unos cuantos amantes de la pequeña pantalla y con el apoyo incondicional del ayuntamiento de Vitoria, el FesTVal fue visto con buenos ojos desde las cadenas y productoras más destacadas de España que valoraron positivamente el escaparate y el punto de encuentro que posibilitaría un festival de estas características.

Este año, pese a la ausencia de estrenos de Mediaset, la VI Edición del FesTVal alzará el telón a la tercera y última temporada de la serie de TVE 'Isabel', a la sexta temporada de 'Águila Roja', al capítulo inicial de la serie de Antena 3 'Bajo Sospecha' y al de la serie de laSexta 'Refugiados', a la serie documental de CANAL+ 'Las dos caras de la noticia', o a lo nuevo del programa de Frank Cuesta en Discovery Max ('Wild Frank'). Además, Vitoria recibirá la visita de actores y equipo de series de gran éxito como 'El Príncipe', 'Cuéntame cómo pasó' o 'El tiempo entre costuras' así como de programas como 'Encarcelados', 'Alaska y Coronas', 'España en serie'... que han sido premiados en esta edición de un festival que sigue manteniendo la T y la V como sus señas de identidad. No en vano, ambas letras se encuentran en "televisión" y en "Vitoria"...

¿El hecho de que este año Mediaset haya decidido no presentar novedades en el FesTVal es un paso atrás para su evolución?

Hombre, evidentemente, hemos perdido un poco en el caso de la filosofía del FesTVal que es tener a todas las cadenas, de ser una fiesta de unión entre ellas... Por lo demás, es una decisión que respetamos e incluso entendemos, puesto que es una estrategia que quieren hacer, y nos apena, pero tiramos para delante.

¿Crees que en Mediaset han podido pensar que estrenando sus novedades en el FesTVal -donde hay un aluvión de estrenos de otras cadenas- no adquieren la misma repercusión mediática que si lo hacen fuera del FesTVal?

No, no creo que eso sea así. Yo creo que es una decisión empresarial suya y ya está. Nosotros tenemos que estar muy agradecidos a Mediaset por el apoyo que nos ha dado en todo este tiempo y que las relaciones son fantásticas entre nosotros.

¿La no presencia de Mediaset hará que el impacto económico del FesTVal en Vitoria sea menor?

En este caso no porque nosotros, cuando nos comunicaron la noticia, lo que hicimos fue completar rápidamente el programa -ahí agradecemos al resto de las cadenas cómo se han volcado echándonos una mano para completar la agenda- del FesTVal, que sigue para adelante.

Tenemos los mismos estrenos de años anteriores, incluso alguno más, y tenemos actuaciones en directo como monólogos, conciertos... El FesTVal, del año pasado a este, va a seguir creciendo. Evidentemente, echaremos de menos a Mediaset porque es un grupo muy potente y al que tenemos un gran aprecio, pero tenemos que seguir adelante.

¿En cuánto estimáis el impacto económico del FesTVal para Vitoria?

No hemos hecho ningún estudio, fundamentalmente, porque el poco dinero que tenemos nos lo gastamos íntegramente en el FesTVal y en que vaya creciendo. Tenemos en cuenta que el 80% de lo que cuesta el FesTVal (que este año ronda los 250.000 euros de presupuesto), prácticamente se queda en la ciudad.

Luego, además, vienen cerca de 500 invitados que hacen unos gastos: comen, cenan, se alojan, se compran ropa...

Sí que tenemos un estudio de la repercusión que tenemos en los medios. Ese estudio marcó que la ciudad de Vitoria consigue con el FesTVal el equivalente a gastarse 8 millones de euros en publicidad en los medios.

¿Cómo en tan poco tiempo -esta es su sexta edición- habéis conseguido que Vitoria se convierta durante una semana en el centro neurálgico de la televisión en España?

¡Es algo que nos lo hemos preguntado muchas veces! Cuando decidimos llevar a cabo la idea de un festival de televisión, ni locos pensábamos que iba a alcanzar este éxito. Nosotros lo hicimos porque confiábamos en la idea y, sobre todo al principio, lo hicimos por gusto.

El mérito de esto tampoco es solo nuestro: las cadenas han confiado en nosotros desde el principio y siempre han estado ahí... gran parte del mérito es suyo. Otra parte del mérito es de la ciudad, una anfitriona perfecta. También productoras, artistas que vienen...

El ayuntamiento de Vitoria es el gran financiador de este festival que, imagino que contará también con aportaciones privadas y patrocinadores. Lo que llama la atención es que echéis a andar este proyecto justo cuando entró la crisis económica de lleno en nuestro país...

¡Esa ha sido otra! [ríe] Nos arriesgamos a hacerlo en 2009 y a medida que la crisis iba empeorando, el FesTVal va creciendo... Pues sí, pero es que hemos tenido que hacer muchos malabarismos.

Este año tenemos un presupuesto muy parecido al de la primera edición. Con respecto al año pasado, hemos perdido algún patrocinador importante con lo que el presupuesto total del FesTVal ha bajado. Pero lo que intentamos es que eso no se note, que el público no se dé cuenta. Hemos prescindido de varias historias que a nosotros nos gustaban, pero que se podían prescindir de ellas sin dañar al FesTVal y también enriquecer otras que le podían dar más crecimiento.

Vuestro principal patrocinador es el ayuntamiento de la ciudad, ¿qué tal van los patrocinios privados?

La ciudad ha confiado en el FesTVal desde el primer momento. Cuando un festival está empezando, aunque tenga éxito, convencer a un patrocinador privado de que sea el principal benefactor del festival es muy difícil.

El principal patrocinador es el ayuntamiento y, alrededor de eso, vamos enriqueciendo el presupuesto a través de otras instituciones, del patrocinio de bancos, marcas, gente de la ciudad que aporta un pago en especie...

O sea, eres un hombre que le sacas dinero a políticos y banqueros...

No, no... [ríe] En un debate me preguntaron que si esto es un buen negocio y yo respondí que, de puertas para fuera, se puede ver así pero, por ejemplo, durante los 4 primeros años nadie del FesTVal cobró un euro: desde el director al último voluntario no cobró nadie.

Ahora mismo, sí que hay gente que estamos ganando dinero con el FesTVal, pero muy poco. No es negocio en absoluto. ¿Que lo puede llegar a ser algún día? Es posible... Ojalá lo sea y, en un momento dado, este festival fuera tan grande que estuviese sustentado casi al 100% por patrocinio privado. Pero ahora su ayuda es fundamental...

A ver si desembarcan Netflix, HBO y demás en España... que los americanos sí vienen con dinero.

Ojalá. Algún contacto hemos tenido y ahí tenemos puestas las miras. Este tipo de empresas están cambiando el rumbo de la televisión y el FesTVal debe estar atento a esos cambios. La evolución que tiene el medio ahora mismo es vertiginosa.

Y ya que el festival de televisión actúa un poco de bandera de la ciudad en estas fechas, ¿cómo venderías tú los encantos de Vitoria?

Siempre presumo mucho de mi ciudad y digo que es la gran desconocida. No tenemos un gancho con el que atraer gente de fuera (un Guggenheim, o playa), pero la gente que viene sale enamorada de la ciudad. Vitoria hay que conocerla, hay que vivirla y, sobre todo, hay que degustarla.