El futuro sostenible pasa por comer sangre y cerebros, según la ciencia
El Laboratorio de Alimentos Nórdicos investiga qué productos pueden ser beneficiosos para asegurar un futuro saludable y sostenible
Madrid
¿Hasta dónde estarías dispuesto a llegar por asegurar un futuro sostenible y saludable? El Laboratorio de Alimentos Nórdicos propone cambiar la dieta y comenzar a comer sangre, cerebros, insectos e incluso hasta heces para garantizar el futuro sostenible del planeta.
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El grupo de investigación, liderado por el chef del respetado restaurante Noma, René Redzepi y el empresario culinario Claus Mayer, comenzó este estudio en 2008 con el objetivo de comprender mejor los sabores y el potencial gastronómico de los alimentos de distintos rincones del mundo.
Después de más de ocho años de investigación, el Laboratorio de Alimentos Nórdicos ha asegurado, tras recorrer el mundo con el objetivo de conocer más sobre las distintas dietas a lo largo del mundo, que desperdiciamos algunos alimentos simplemente por el hecho de que parezcan en mal estado.
Desde insectos a alimentos que parecen podridos
En el laboratorio nórdico, que nació en un simple barco para terminar en un edificio de la Universidad de Copenhague, los investigadores trabajan con todo tipo de productos. Desde Insectos y sangre hasta jalea, fermentados que a veces huelen y desarrollan moho o alimentos que parecen podridos, tal y como explica el director de Investigación Culinaria y Desarrollo, Roberto Flore, a The Independent en una entrevista.
"El principal problema con la sostenibilidad es que hoy en día estamos completamente desconectados de los alimentos", asegura Flore. Es por esa misma razón que no comemos insectos, un alimento presente en muchas culturas como la africana, o medusas, por ejemplo.
En su web, el grupo de investigadores muestra cada uno de sus experimentos. En uno de ellos habla sobre cómo la sangre podría ser un gran sustituto del huevo en los productos dulces gracias a sus propiedades coagulantes. El estudio asegura que pese a que la sangre animal tiene una larga historia culinaria en Europa, en la actualidad es rechazada por muchas culturas simplemente por ser sangre. Lo mismo sucede con los cerebros, sobre todo con los de los ratones, un manjar según los investigadores.
Las heces como fuente de alimento
Los investigadores han asegurado que las heces deben ser exploradas como fuente de alimento ya que muchos mamíferos, tales como los hipopótamos o los elefantes, comen las heces de su madre con el objetivo de introducir microbios útiles en sus sistemas digestivos.
El Laboratorio de Alimentos Nórdicos asegura que un microbioma diverso en el intestino se convierte en vital para la salud humana, por lo que cree que las heces podrían convertirse en una gran fuente de alimento de cara al futuro. En la web podrás encontrar todos y cada uno de los experimentos llevados a cabo por el grupo de investigación. ¿Seremos capaces de cambiar nuestra dieta de cara al futuro?
David Justo
(Astrabudua, 1991) Periodista especializado en tecnología y buscador de historias virales e inverosímiles...