El paraíso 'foodie', en una carpa de Bilbao

Bilbao

Encajada entre la Ría de Bilbao y el Casco Viejo, una carpa blanca vuelve a alzarse en el Arenal. Dentro hay un poco de todo: cerveza artesana, gildas, rosquillas de anís, ventresca de atún, hamburguesas de buey... Y es que, por quinto año consecutivo, Bilbao Degusta reúne tres ingredientes esenciales para la felicidad de cualquier vasco: bocados a buen precio, abundancia de productos gourmet y cocina en directo.

Entre vecinos de la villa y turistas con ganas de ver el Guggenheiem, Bilbao Degusta espera atraer a unas 40.000 personas hasta el próximo domingo, pero es ni entre todas esas reunirán  tantas estrellas Michelin como las 11 que suman Martín Berasategui y Eneko Atxa, invitados especiales de la inauguración, junto al alcalde de la ciudad.

Consciente de que el puente de la Constitución es un muy buen momento para recorrer el País Vasco y hacer turismo gastronómico, Eneko Atxa ha recordado que "la gastronomía y la cultura son punta de lanza", y ha animado a los oyentes de La Ventana de Euskadi a comer en el restaurante de su maestro, aún eufórico por la histórica octava estrella Michelin conseguida hace solo unos días.

Berasategui, a su vez, ha recomendado el restaurante de su discípulo,  Azurmendi, y es que el restaurante de Eneko Atxa, no en vano, es el único tres estrellas de la provincia de Vizcaya. Por Bilbao Degusta, de todas formas, también van a pasar (para cocinar) otros grandes de la zona: Paul Ibarra (Los Fueros), Zuriñe García (Andra Mari)...

Más allá de las demostraciones culnarias, Bilbao Degusta es, como su propio nombre indica, un buen lugar para saborear bocados y productos de la zona: Gildas del Norte (1 euro), pintxos de bacalao (1 euro con copa de vino), pastel vasco de Mañeko o las hamburguesas de Amaren (3,60 euros), elaboradas con la carne de dos bueyes de 1.600 kilos que, según cuentan, batieron el récord del matadero de Llodio hace uno días.

También están presentes en la feria —organizada por la Cadena SER— los productos de marca Alakrana, que deben su nombre al barco pesquero secuestrado hace unos años en el Índico y que ahora, con base entre Isla Mauricio, captura y ultracongela atunes destinados a la conserva. En el stand de Echebastar, también ofrecen atún ahumado y pequeñas tapas de tartar o tataki.

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Íñigo García, responsable de Urban Beer, con sede en Zamudio, explica que su objetivo es conseguir "una cerveza de calidad que no deje indiferente" y reivindica que, aunque en España se tome casi como un refresco, en realidad es una bebida tan gastronómica como el vino: "Hacemos una de 11 grados, Ama, poco amarga pero muy aromática".

En el stand de North Alaska, se atreven con uno de los iconos gastronómico de la ciudad —el bacalao— y lo hacen, además, con la alta autoestima que, según el tópico, caracteriza a los de Bilbao. "Hicimos una presentación de la Escuela de Hostelería de Vitoria y de los 40 chavales, 39 se quedaron con el nuestro", explica Ángel Rubio.

"Se importa de Alaska, en Hondarribia se descongela y filetea, y en Laredo se le aplica la salmuera", detalla. El resultado, según dicen, es un producto totalmente distinto, con mucha proteína y un sabor más suave. Pero eso no es todo: "El pilpil liga mejor. En tres minutos te hago uno... ¡y me sobran 50 segundos! ¡De verdad!".