Italia multará a quien moleste a sus vecinos con el olor a fritanga
La justicia italiana multa a una pareja con 2.000 euros por "acoso olfativo"
Madrid
La justicia italiana ha condenado recientemente a una pareja de 78 años a pagar 2.000 euros y los gastos del proceso judicial por "acoso olfativo", un delito que, tal y como ha confirmado el juez a cargo del proceso, se enmarca dentro de la ley que prohíbe el "arrojamiento peligroso de cosas" en espacios de uso compartido, pensado para evitar emisiones desagradables tanto de fábricas como de restaurantes.
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El vecindario denunció a la pareja por los humos, ruidos y malos olores de su casa. Al parecer, los vecinos del tercero no aguantaban el olor que emitían las contundentes salsas de la pareja para mezclar con la pasta y "fritti misti" (pescados y mariscos fritos), que llegaban a través de una fisura en la salida de humos de la cocina.
De Gorizia al Tribunal Supermo de Roma
Uno de los denunciantes daba a conocer la razón por la que el vecindario denunció a la pareja de 78 años: "Todo mi apartamento se impregnaba con el olor de salsa para la pasta y pescado frito. Parecía que su cocina estaba en mi casa". La sentencia del primer juicio contra la pareja, que tuvo lugar en la ciudad de Gorizia, la región que sucedieron los hechos, fue clara: culpables por comportamiento antisocial.
La pareja decidió apelar a un tribunal superior en la ciudad de Trieste, quien ratificó la sentencia de Gorizia y acusó nuevamente a la pareja de comportamiento antisocial. Finalmente, los denunciados llevaron el caso a Roma, donde, tras mucha deliberación, se confirmó las resoluciones de los dos tribunales inferiores.
El "acoso olfativo" entra en el código penal
Tal y como explica el abogado especializado en disputas vecinales, Matteo Santini, a La Repubblica, este tipo de denuncias entre vecinos son muy frecuentes. En algunos casos, los vecinos han llegado a pedir compesaciones económicas por tener que cambiar de residencia, sufrir depresión o traumas psicológicos, entre otras cosas.
No obstante, a partir de la sentencia 14467/2017, el Tribunal Supremo ha dado a conocer que tanto el exceso de humos como los olores derivados de los aceites fritos entrarían en el código penal como parte del "getto pericolose de cose", la normativa que legisla los gases, vapores o humos emitidos o arrojados a la vía en espacios de uso compartido.
David Justo
(Astrabudua, 1991) Periodista especializado en tecnología y buscador de historias virales e inverosímiles...