Las vacas que emularon a las cebras confirman el gran secreto de estos animales
La investigación determina que las rayas de las cebras ayudan a evitar los parásitos que chupan la sangre
Madrid
¿Por qué las cebras tienen rayas? El patrón de coloración de las cebras ha sido, desde hace más de 150 años, un importante objeto de especulación. Mientras que algunos consideran que cuentan con esa distribución de rayas blancas y negras para camuflarse entre la hierba o la maleza, otros opinan que se trata de un mecanismo de mimetismo para evitar el ataque de los depredadores.
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Sin embargo, un artículo publicado el año pasado en la revista de divulgación científica Plos One determinó que el propósito principal de las rayas de las cebras es evitar los parásitos que chupan la sangre. Desde entonces, muchas han sido los investigadores que han tratado de conocer más sobre este asombroso mecanismo de defensa.
Así fue el estudio
Entre ellos destaca un grupo de investigadores japoneses, quienes han probado este patrón de coloración en las vacas para analizar su efectividad. A través de un estudio publicado en Plos One, el equipo de investigadores ha demostrado que el número de insectos alrededor de las vacas se reduce a la mitad cuando estas están pintadas con el patrón de rayas.
Para llegar a esta conclusión, el equipo liderado por Tomoki Kojima decidió pintar a un grupo de seis vacas negras japonesas con el llamativo patrón de las cebras. Una vez hecho esto, los investigadores observaron a las vacas durante tres días, con cámaras de alta resolución, para hacer un recuento del número de insectos que se les acercaban.
El éxito del patrón de las cebras
Para asegurarse de que fuera el patrón de la cebra y no la pintura lo que repelía a los tábanos, los científicos crearon dos grupos de control. Mientras que el primero de ellos estaba compuesto con vacas negras pintadas con rayas negras, el segundo contaba con varias vacas negras sin pintas. Tras esta investigación, los científicos descubrieron que las rayas de las cebras redujeron el número de insectos que se posaban sobre las vacas de forma considerable.
El número de insectos contabilizados en torno a las vacas que emulaban a las cebras era menos de la mitad respecto a lsa vacas sin pintar. Pero no solo eso. Según sus cálculos, el cebrado redujo el número de movimientos para repeler a los insectos hasta un 20%. En definitiva, el patrón de coloración de las cebras fue fundamental para repeler a insectos como los tábanos.
David Justo
(Astrabudua, 1991) Periodista especializado en tecnología y buscador de historias virales e inverosímiles...