El sencillo truco para que las mascarillas sean realmente efectivas
Una fuga de aire a través del 2% del área de la mascarilla descubierta deja pasar el 50% del aire sin filtrar
Madrid
Durante estos últimos días se ha incidido en la importancia de ajustarse debidamente la mascarilla para evitar la propagación de la COVID-19. Y es que, tal y como y como explicaba el profesor de Química de la Universidad de Colorado, José Luis Jimenez, a través de su cuenta de Twitter, un mal uso de las mascarillas puede provocar que acabemos expulsando una nube de aerosoles que pueden ser fatales a la hora de propagar la enfermedad.
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Después de analizar diversos estudios, el investigador asegura que una fuga de aire a través del 2% del área de la mascarilla descubierta deja pasar el 50% del aire sin filtrar. Si quieres evitar esa temida nube de aerosoles, es muy importante que ajustes la mascarilla al rostro de la mejor manera posible. Por lo tanto, y si eres de esas personas que se pone la mascarilla en forma de X, te pedimos que dejes de hacerlo cuanto antes porque estarás dejando varias zonas de tu rostro al descubierto.
El sencillo truco para que las mascarillas sean realmente efectivas: tan solo necesitarás dos segundos
Según un estudio publicado este miércoles por los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos, las mascarillas no sellan muy bien de por sí. Por esa misma razón, y para ayudar a que estas sean realmente efectivas, recomiendan hacerle un nudo en la parte delantera de las gomas, a la altura de la comisura boca. Gracias a este sencillo gesto, evitaremos dejar varias zonas de nuestro rostro al descubierto y que la enfermedad se propague con facilidad.
Pero no solo eso. Desde el CDC recomiendan usar alguna braga de nylon o sistemas similares sobre la mascarilla quirúrgica, pues ayudaría a cubrir cualquier hueco que se haya quedado al descubierto por la forma de nuestro rostro. También utilizar una doble mascarilla, una opción cada vez más popular en Estados Unidos que te ayudará a acabar con la nube de aerosoles. Concretamente una mascarilla quirúrgica en primer lugar y una de tela a continuación, un proceso que aumentaría la protección contra el virus de manera significativa tanto para quien las usa como para terceras personas.
Los métodos de la CDC para combatir las nubes de aerosoles: desde la doble mascarilla hasta las FFP2
Después de analizar las distintas opciones del mercado, los investigadores han asegurado que la combinación de una mascarilla de tela sobre una quirúrgica reduce la exposición del virus en un 82,2% para una persona sin protección. Un porcentaje que se eleva hasta el 96,4% cuando ambas personas utilizan doble mascarilla. Para llegar a esta conclusión, los investigadores simularon la tos de una persona a través de cabezas elastométricas. A medida que la cabeza emitía partículas de cloruro de potasio, los investigadores podían analizar de las distintas combinaciones para proteger a la sociedad contra la COVID-19.
En caso de que no te sientas cómodo con la doble mascarilla, desde los CDC sugieren utilizar una única de alta protección. Después de analizar la eficacia de las FFP2, los investigadores han llegado a la conclusión de que reduce la entrada de aerosoles potencialmente infecciosos en un 95%. Por todo ello, los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades reconocen que es una buena alternativa para hacer frente a la COVID-19. Gracias a este tipo de gestos ayudaremos a reducir la posibilidad de contagiar a terceras personas en caso de que hayamos contraído el virus sin saberlo.
David Justo
(Astrabudua, 1991) Periodista especializado en tecnología y buscador de historias virales e inverosímiles...