Un único hombre a disposición de Zidane sabe lo que es marcar en el Wanda antes de un derbi en el alambre

Las dificultades del Real Madrid para encontrar gol han sido asignatura pendiente desde el comienzo de temporada y un problema que se ha acrecentado en las últimas semanas con la ausencia de su máximo goleador este curso: Karim Benzema. Para el derbi ante el Atlético de Madrid, Zinedine Zidane ha recuperado al francés, pieza fundamental en su engranaje ofensivo, aunque su reincorporación no modifica el dato minúsculo que reflejan sus precedentes en el Wanda Metropolitano en materia goleadora. De toda la plantilla disponible, solo Casemiro sabe lo que es marcar en el nuevo estadio del vecino.

Casi cuatro años y tres derbis después, el camino hacia el gol en el feudo rojiblanco se ha atragantado para ambos conjuntos. En esta ocasión, los blancos hacen frente a una cita de máxima responsabilidad para mantener vivas sus opciones por el título de Liga sin apenas artillería experimentada en ver puerta en estas citas. La lesión de Mariano Díaz ha sido la última traba en este sentido.

Los números, además, constatan cómo las delanteras madridistas se han topado una y otra vez con la meta que ha defendido Oblak en todos estos duelos. Ningún atacante del vestuario actual ha salido del Wanda con un nuevo gol en su cuenta particular. Con estas cualidades sí encontramos a Gareth Bale como el único jugador ofensivo que ha brindado a la afición merengue una celebración en el choque directo de la capital. Lo hizo en el 1-3 que se regalaron en 2019, aunque en esta ocasión su cesión en el Tottenham le impedirá repetir.

Este ha sido, precisamente, el único derbi en el que se ha movido el marcador de las instalaciones colchoneras desde su inauguración en 2017. Han predominado los duelos tácticos y conservadores que han propiciado otras dos igualadas sin goles. De no buscar la victoria con decisión esta vez, el FC Barcelona se frotaría las manos desde la segunda posición de la tabla en la que acecha al liderato.

De la terna goleadora que se impuso en suelo atlético también se ha caído Sergio Ramos. El camero, cuya renovación sigue en el aire, ha dejado de entrar en las convocatorias de su equipo desde la Supercopa de España. Molestias en la rodilla izquierda le impidieron ejercitarse con normalidad en los choques siguientes y su paso por el quirófano resultó inevitable en febrero. Su recuperación avanza hacia la recta final, aunque su participación frente al Atlético está descartada.

Excepción entre unas pobres cifras

La pobre cifra de goles deja, por tanto, a Casemiro como el único soldado blanco que afrontará el partido de este domingo a sabiendas del significado de marcar en ese estadio. De tijera, con un escorzo, el brasileño batió a Oblak tras un rebote en el balón parado en el que la pelota quedó embolsada en el aire en plena área pequeña.

Ampliar

Pese a su presentación como el mediocampista del Real Madrid con mejores argumentos para la contención, el carioca también está haciendo horas extras sorprendiendo desde atrás y siendo un baluarte en las jugadas de estrategia. A falta de pegada arriba, en esta temporada ya ha salido al rescate de los suyos hasta en seis encuentros, cinco de ellos en LaLiga. Consciente de ello ha vuelto a ser el equipo de Diego Pablo Simeone, que en el encuentro de ida de esta campaña fue una de sus víctimas.

Estos números, aunque minúsculos, siguen mejorando la artillería de la que ha dispuesto el Atlético de Madrid en sus nuevos derbis. Solo un hombre con la camiseta colchonera ha conseguido marcarle al eterno rival en el Wanda: Antoine Griezmann. La parroquia rojiblanca busca, por tanto, un nuevo ídolo que deje su sello en el cuadro vecino.