Emprender con más de 50 años: decálogo para dar forma a un proyecto

Madrid

"Ser emprendedor no es ser un soñador. El soñador está en las nubes. El emprendedor fabrica un avión para llegar a ellas", dice Joan Boluda, profesor que, entre otras cosas, enseña a crear negocio online desde cero. Ahora que la pandemia hace estragos, el emprendimiento se vuelve a presentar como una oportunidad que parece estar reservada a la gente joven, pero nada más lejos de la realidad.

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Este martes, se han publicado los datos del paro registrado que dejó 3.949.640 desempleados en marzo, de los cuales, 1.940.154 son mayores de 45 años. Personas con experiencia y vitalidad y, sobre todo, con ganas de seguir aportando valor a la sociedad. Es el caso de Adolfo Ramírez que hasta 2017 fue director General Adjunto del Grupo Banco Santander en el Área de Tecnología y Operaciones y ahora es cofundador del Movimiento Vidasilver.com, un espacio de encuentro —físico y digital— para quien tenga interés en participar y contribuir en el desarrollo de esa generación sénior, ya sea a nivel particular, institucional o de empresa. 

Según datos internacionales, los emprendedores mayores tienen una tasa de éxito del 70% al crear nuevas empresas, mientras que en los jóvenes el porcentaje oscila en torno al 28%. Ramírez reconoce que ha encontrado en el emprendimiento "una nueva y apasionante etapa profesional" y, basado en su experiencia como asesor en transformación y liderazgo, comparte algunos consejos que pueden ayudar a dar quien esté pensando en dar el paso:

1. Realiza un autodiagnóstico de tus fortalezas y oportunidades: ¿En que soy bueno? ¿Qué experiencia y conocimiento he adquirido en mi anterior etapa profesional? ¿Qué otras habilidades puedo adquirir sin un gran esfuerzo? ¿Qué negocios conozco o puedo conocer en profundidad? ¿Qué red de contactos tengo? ¿Cuá es mi capacidad de liderazgo?

2. Visualiza tu idea. Imagínate tu idea funcionando. ¿Cómo será el día D+1? ¿Y transcurrido un año? ¿Y después de tres años ¿Cómo he aportado valor? ¿Qué nuevas relaciones he establecido? ¿Qué dificultades habré tenido que superar? Si lo "ves", el camino es muchos más sencillo.

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3. Disfruta construyendo tu Plan de Negocio. Realizar el plan de negocio es imprescindible, pero no puedo convertirse en un proceso estresante. Es el momento de poner negro sobre blanco las ideas, con rigor, pero también con creatividad. En este caso, el uso de modelos como “Canvas” (en internet existe valiosa información para su desarrollo), puede resultar de gran ayuda para convertir el sueño en realidad.

4. Haz un presupuesto riguroso y ten disciplina en la administración. La clave presupuestaria está en el buen equilibrio entre ambición y realidad, pero inicialmente si eres un poco conservador, te ahorrarás más de un quebradero de cabeza. No te puedes quedar sin presupuesto a mitad del camino. En la administración, seguramente necesites algún especialista que te genere confianza en los “números” y te permita dedicarte íntegramente a lo importante: los clientes y el negocio. No te olvides de investigar potenciales subvenciones al emprendimiento y en definir un plan de financiación si lo necesitas.

5. Identifica tus indicadores de gestión. Es importante saber si lo estás haciendo bien. Algunos de estos indicadores serán: ritmo de captación de clientes, coste adquisición de clientes, ingresos por los distintos canales, costes, ratio de eficiencia, índice de satisfacción de los clientes, etc.

6. Contrasta con expertos, pero sobre todo escucha a tus potenciales clientes. Finalmente, tú serás el que tome la decisión, pero cuanta más información de calidad tengas mejor será la propuesta de valor. Expertos, tanto en emprendimiento como en el negocio en el que te vayas a enfocar hay muchos y muy buenos y te van a dar buenos consejos. No los desperdicies, insisto, tú no lo sabes todo, pero sobre todo dedica tiempo a hablar con tus potenciales clientes y trasladar sus necesidades y aportaciones a tu solución.

7. Encuentra a los colaboradores adecuados. El equipo es definitivo tanto para el éxito de la empresa como para disfrutar de la nueva etapa. No te precipites, los perfiles tienen que ser muy buenos tanto en los aspectos técnicos como en los personales. La conexión entre vosotros y con el proyecto tiene que ser total.

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8. Olvídate de darle la última vuelta para salir. Tu tiempo es oro. Lánzalo en cuanto estés razonablemente satisfecho con la solución y pruébalo en la realidad, es la única manera de testar la idea. Si es preciso pivota y vuelve a la carga.

9. Véndelo con energía. Planifica la acción comercial sin desperdiciar ninguna de las posibilidades que te ofrece la digitalización. Es el momento de utilizar la red de contactos y mantener activas las redes sociales. El mundo del marketing digital tiene sus claves y seguramente al principio necesites el apoyo de algún especialista. Prepara un discurso ganador y cuéntalo con entusiasmo.

10. Pon pasión y sé perseverante. ¡Es tu proyecto!