El FMI confirma el recorte de la previsión de crecimiento de España para 2022

Madrid

El año empieza con peores perspectivas para la recuperación de lo esperado. El Fondo Monetario Internacional calcula que ómicron y la persistencia de la inflación y de la falta de suministros frenarán el crecimiento de la economía, especialmente en los países más avanzados, entre los que está España.

La actualización del Informe de Previsiones que acaba de presentar el FMI estima que la economía española crecerá un 5,8% en 2022, confirmando un recorte de 8 décimas sobre la previsión anterior que ya había adelantado a finales de diciembre, y lejos del 7% de crecimiento que prevé el Gobierno en su último cuadro de proyecciones macroeconómicas. Pese a este recorte, la española será la economía que más crecerá este año, por delante de Estados Unidos, Alemania, Reino Unido y China, según el FMI.

Los números del Fondo parten de la premisa que la economía española creció el año pasado un 4,9%, una cifra muy inferior a la prevista por el Gobierno (6,5%) y a las previsiones de todos los organismos internacionales. Y a esa peor evolución le suma un recorte de 8 décimas a las previsiones para este año, que también quedan lejos del 7% de crecimiento del PIB que refleja el último cuadro macroeconómico presentado por el Gobierno.

Las malas noticias para 2022 se compensan en parte con una mejora de las previsiones de crecimiento para 2023. Los números del FMI mantiene que España volverá a ser el año que viene la economía que más crecerá entre los países avanzados con un crecimiento del PIB del 3,8%, lo que significa sumar 1,2 puntos a su anterior previsión. Y a esas previsiones es a las que se agarra el Gobierno que destaca que las previsiones del Fondo "confirman la solidez del actual ciclo expansivo que permitirá que España sea la economía más dinámica de la zona euro tanto en 2022 como en 2023", destaca el secretario de Estados de Economía, Gonzalo García. 

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El crecimiento mundial se ralentiza

A nivel mundial, el Fondo Monetario reconoce que la economía ha llegado a 2022 en una posición de mayor debilidad de lo esperado y que se han cumplido algunos de los temores reflejados en su anterior informe: nuevas restricciones para frenar repuntes de contagios, mantenimiento de los problemas de suministro y subidas de la inflación. Fruto de todo ello, el FMI rebaja hasta el 4,4% sus estimaciones de crecimiento para la economía mundial en 2022, medio punto menos de lo previsto en octubre.

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La corrección de las previsiones se explica también por qué las dos grandes potencias económicas del mundo, Estados Unidos y China, son las más castigadas en este informe. En el caso de Estados Unidos, el FMI rebaja 1,2 puntos sus previsiones de crecimiento por los efectos de los problemas en las cadenas de suministro, la anunciada subida de tipos de interés y la retirada de los estímulos fiscales. Para China, la rebaja es de 0,8 puntos y se justifica por la política de contagios cero que lleva al gobierno de Pekín a aplicar restricciones económicas que frenan el consumo.

En el caso de la zona euro, el informe prevé una rebaja de 4 décimas al crecimiento de este año por las restricciones aprobadas para frenar a ómicron y por los efectos de la falta de suministros que afectarán especialmente a Alemania.

En contraste con este recorte de previsiones para 2022, el FMI mejora todas sus estimaciones para 2023. Explica el informe que esta mejora es puramente mecánica al considerar que los factores que frenarán el crecimiento este año desaparecerán en los próximos meses de manera que la economía tendrá menos obstáculos el año que viene y podrá crecer más.