La falta de aceite de girasol agrava la crisis del sector conservero en Cantabria

Santander

La falta de aceite de girasol está agravando la crisis del sector conservero en Cantabria. El 70% del aceite de girasol que utilizan las conserveras en nuestro país viene de Ucrania. Cantabria fabrica, sobre todo, anchoa y el 30% del este producto se elabora con aceite de girasol.

Las empresas  han activado planes de contingencia y temen grandes desajustes entre la oferta y la demanda por problemas de desabastecimiento. El presidente de la Asociación de Fabricantes de Conservas de Pescado de Cantabria (CONSESA), Eduardo Sanfilippo, reconoce que el sector está "muy preocupado" por la falta de suministro. Además, el precio de otras materias prima sustituvas tambien han aumentado. La principal alternativa pasa por cambiar el aceite de girasol por otros sustitutivos como el aceite de maiz o el aceite de soja. "No podremos sustituirlo por aceite de oliva porque su precio se ha duplicado".

Las conserveras de Cantabria utilizan, fundamentalmente, aceite de oliva para elaborar anchoas, pero el 30% del producto que se distribuye y se vende se hace con aceite de girasol. "Hay una parte importante que va con aceite de girasol. La anchoa de precio barato e incluso la anchoa del Cantábrico que va al segmento de hostelería, se produce con aceite de girasol", ha explicado Sanfilippo, en Hora 14 Cantabria.

Los precios de la industria están "desbocados" por la inflación y hay otros materiales que utilizan las conserveras, como el aluminio, que también se han encarecido.