La campaña termina en Sierra Mágina con un desplome de la producción de aceite del 71,8%

Jaén

Son muchos los adjetivos que se pueden utilizar para calificar la ya terminada campaña de aceituna en la provincia de Jaén y casi todos ellos son negativos. Esto es lo que ocurre en la comarca de Sierra Mágina donde el Consejo Regulador ha hecho balance de estos meses de trabajo asegurando que el resultado "es muy negativo, ya que la producción se ha reducido mucho" y apuntan que "se trataría de la cosecha más baja de nuestra historia".

Los datos que ha ofrecido la entidad indican que se han recogido 49.500 toneladas de aceituna, lo que supone un 70,7% menos que hace un año. Sin embargo, la caída en cuanto a la producción de aceite es ligeramente superior al llegar al 71,8% menos que en la 2021/2022 al quedarse solo en 10.780 toneladas de aceite molturado. En lo que respecta al rendimiento, no ha habido cambios con un 21,78%.

La DO ha elogiado "el esfuerzo del sector al adelantar la recolección" lo que ha permitido producir 2,3 millones de kilos de aceite de oliva virgen extra acaparando un 21% de la producción total, y todo ello a pesar de los importantes temporales de viento y lluvia que azotaron nuestra tierra durante el pasado mes de diciembre. La única buena noticia llega del aove etiquetado con el marchamo de calidad de Mágina el año pasado que ha llegado a la cifra récord de 2,87 millones de litros, un 16,4% y 31,05% más que en 2021 y 2020 respectivamente, con 40 marcas que usaron la certificación.

También se mantiene elevado el número de almazaras y cooperativas que producen aceite de oliva virgen extra temprano siendo ya que 21 de las 26 entidades inscritas optan por producir este aceite que se recoge durante el pasado mes de octubre alcanzando los 150.000 kilos. De esta manera, desde el Consejo apuntan a que "se podría cubrir casi la totalidad del aceite demandado por los consumidores en campañas anteriores" en base a las cifras de aove certificado y envasado.

El Consejo Regulador advierte que la situación que viven los olivareros, cooperativas y almazaras es "muy complicada" ya que, aseguran que la subida de precios del aceite todavía está muy lejos de "compensar esta merma tan importante de producción, causada por la climatología tan desfavoreable de 2022 con una combinación de sequías y olas de calor". Por último, esperan que en los próximos meses "lleguen suficientes precipitaciones" con el fin de tener "una cosecha normal" para la próxima campaña aunque avisan de una "creciente preocupación" porque la lluvia que cayó hace dos meses no ha continuado.