Juzgan a una empresa por despedir a un trabajador tras pedir una botella de agua en plena ola de calor

Tenerife

Andrés Fuentes trabajaba cargando cajas en una empresa distribuidora de bebidas de Tenerife cuando pidió hasta en dos ocasiones una botella de agua, en plena ola de calor. Sus superiores le negaron el acceso al agua alegando que era necesario esperar al descanso o a desembalar un palé de botellas. Andrés no podía esperar a esto, por lo que discutió con sus superiores y acabó dando portazo. Esta reacción de costó un despido disciplinario ejecutado por la empresa Adecco Outsourcing, que gestiona el servicio de distribución de la empresa Incabe en Tenerife.

El abogado de UGT Fernado Martines Barona Flores, al cargo de su defensa, considera que se trata de un despido nulo y exigen la readmisión inmediata del trabajador despedido por pedir una botella de agua en plena ola de calor. Barona califica de inaceptable la actitud de la empresa y recuerda que en este tipo de trabajos, los empleadores tienen la obligación de poner a disposición de los empleados agua de manera fácilmente accesible, y no a través de procedimientos agravados, como es el caso. El juicio se celebrará en marzo de 2023.

"Al trabajador se le dijo que bebiera agua al final de su jornada mientras cargaba cajas con calor, no se puede tolerar", explica el abogado de la defensa

"Se pide la nulidad del despido, no solamente la improcedencia", explica Fernando Martínez Barona Flores, abogado de la defensa, que entiende que se trata de una vulneración de derechos fundamentales. "Estábamos en plena ola de calor y a este trabajador se le negaba sistemáticamente poder tener acceso a beber agua durante su jornada de trabajo", añade. "La empresa le exigía continuamente que esperara al final de su jornada para poder beber o bien que esperara a que le autorizaran a poder coger agua de los sobrantes de las mercancías y envíos defectuosos", explica el abogado. El despido disciplinario se produce a consecuencia de la actitud presuntamente violenta que toma el trabajador al negarsele la posibilida de beber agua de forma inmediata.

"Todo el mundo comprenderemos cómo podemos reaccionar cuando tenemos mucha sed en un trabajo eminentemente físico, y como consecuencia de eso se produce su despido. No se puede tolerar. En un trabajo físico en plena ola de calor todo el mundo necesitaría beber agua con más frecuencia y la Ley de Prevención de Riesgos Laborales en ese sentido es clara, los trabajadores tienen que tener agua disponible en un punto cercano y fácilmente localizable", añade. "En este caso no era así, se lo impedían y le decían: al final de la jornada, es cuando tu bebes", concluye Martínez Barona. El juicio se celebrará en los juzgados de lo social de Santa Cruz de Tenerife en marzo de 2023.

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